Ay, tiempo, que te llevaste mis horas
Ya siento como me golpean las horas
Riendo el tiempo de mí está
Y tiento al reloj a otra ronda.
Me encerraste en un laberinto
Donde me ahogo en vino tinto,
Sé que nunca veré un día extinto
Al fuego de los eternos siglos.
Dejaste polvosas a mis memorias
Y dolorosas mis esperanzas.
Busco mis recuerdos, lo intento
Y todos se esfumaron en el viento.
Las semillas que fui a sembrar
Se convirtieron en árboles grises.
Todos dicen que los fui a colorear
Pero yo pensé que aún ni tenían raíces.
Veo las horas correr
Y mi día se acortó.
Mi vida se arrugó,
Y mis sueños también.