La primera chica

832 21 1
                                    

Luego de que la luz me golpeara. Sentí una fuerte presión en mi cuerpo, como si hubiera sido aplastado por algo. No podía ver dónde me encontraba, solo que la pequeña diferencia era que podía escuchar ruidos. Al menos sabía que estaba en el exterior.

"Demonios... La luz me segó... Necesito acostumbrar mis ojos..."

Luego de un rato, mientras trataba de ponerme de pie, me tropecé. Cai una pequeña altura. No comprendía nada ahora.

"Que bien... Ahora sí puedo caer... Un momento..

Pude ver una leve luz donde me encontraba. Estaba al fondo. Así que me acerque con mucho cuidado y poco a poco empecé a ver la luz.

Una vez que llegue, mis ojos no lo podían creer.

Una vez que llegue, mis ojos no lo podían creer

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Era una biblioteca enorme... Si, enorme... Todo era demasiado grande, como si se hubiera vuelto gigante todo... O al menos hasta que me mire.

"Soy... Soy pequeño?"

Yo era el pequeño. Estaba en una esquina de una de las librerías. A lado de mi, había más muebles. Me sentía como un pequeño insecto en los muebles de alguien.

No perdí más el tiempo y trate de ver si había alguien en la habitación. No parecía que hubiera alguien, así que tal vez estaba algo sola.

Tenía tantos lugares por ir a explorar, pero yo quería llamar la atención de alguien que me ayudara en mi situación.

"Por qué soy pequeño? Y que hago aquí? No entiendo nada."

Trate de calmarme y pensé que se trataba de un sueño. Así que me pellizque pero en verdad me dolió.

"Auch... No es un sueño, bueno, al menos debo llamar la atención de la persona que viva aquí."

Y una vez que revise que era seguro, me dispuse a salir del rincón y llegar a la silla del frente.

Al principio tuve miedo, pero al ver que nadie entraba me sentía algo calmado.

Una vez que llegue a la silla, empecé a pensar.

"Bien, ahora... ¿Qué hago? ¿Cómo llamo su atención? Esta persona tal vez podría ayudarme... Pero cómo llamo si atención."

No sabía si esperar a que entrara o aventurarme a salir y correr el riesgo.

Casi antes de tomar la desición, un milagro paso. Empecé a escuchar pasos, y una ligera voz. Parecía que estaba por entrar a la habitación.

"Bien, al menos podré ver a quien le pertenece esta casa. Así podrá ayudarme."

Y así los pequeños pasos de la persona empezaron a volverse terremotos pequeños. Poco a poco la vi entrar. Era una chica algo peculiar... No lo podía creer.

Tenía un vestido algo azul, pelo blanco y unos ojos azules... Era algo joven... Pero yo la conocía... Era...

"Es... Rosalina?

Una aventura en miniatura Donde viven las historias. Descúbrelo ahora