Teen Wolf (Stiles Stilinski) #3B

8- Casa eiquen

Narra Stiles

Estaba en el auto con papá, me pusieron algo que me mantiene en mí, aunque sea por ahora.

Estábamos en silencio, ninguno de los dos quería hablar, paramos afuera de la casa eiquen, mire a papá antes de bajarme.

La moto de Scott paro y él y Lucí se nos acercaron.

-¿porque no nos dijeron?- pregunto Scott.

- Porque queríamos evitar algo como esto - respondió papá.

- solo son 72 horas - seguí yo.

- es el mismo lugar de dónde salió barrow, el que tenía un tumor lleno de moscas - me recordó mi novia - aún no sabes todo - le dijo a papá.

- se lo suficiente, nogitzune, kitzune, oni... o como sea que se llame - siguió papá.

- No, sorprendentemente todo es correcto - le dije a papá.

- chicos, vi una resonancia magnética igual a la de mi esposa... y eso en realidad me aterra... iré a Los Ángeles mañana para hablar con un especialista.

-¿porque lo va a dejar aquí?- le pregunto Scott.

- no lo hará, fue decisión mía - respondí.

- no puedo ayudarte si estás aquí - me dijo Lucí acercándose.

- y yo no puedo lastimarte - puse mi mano en su mejilla - Lucí, recuerdo lo que pasó, lo que te hice.

- tú no me hiciste nada, Stiles - se nego.

- amor, por favor - ella solo agarró mi cuello y me besó, puse mis manos en su cintura profundizando el beso, en cuanto nos separamos la abrace.

- Deaton tiene algunas ideas, argent traerá gente - me dijo Scott, me separé de Lucí - encontraremos algo, y si no podemos...- lo interrumpí.

- y si no pueden... si no pueden tendrán que hacer algo por mí, Scott - me acerqué a el - prométeme que no vas a dejar que salga.

- vamos - dijo papá y entramos, alejándonos de ellos.

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- Señor Stilinski - fuimos a recepción - por aquí por favor - nos llevó a una oficina - las primeras 72 horas No se permiten llamadas, correos electrónicos o visitas, de aquí iremos a un examen físico, en la mañana serás evaluado por una psicóloga, hablara con una trabajadora social y asistirá a terapia.

- siento que estamos olvidando algo - dijo papá, la señora dejo unas pantuflas en la mesa.

- usaras esto, Stiles, no se permiten agujetas, no tienes cinturón ¿o sí?... y por favor vacía tus bolsillos aquí - me dio una bandeja.

- Oye, tu almohada, olvidamos tu almohada
...- yo lo interrumpí.

- papá, está bien.

- No, hijo, no vas a poder dormir, tenemos que volver.

- no, papá, está bien - incisti - no la necesito.

- No puedo creer que la olvidáramos, cada vez que vamos a un hotel, lo primero que empacas es tu almohada.