008; Cereza (I)

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"Va ser divertido, te suplico que vengas, te júro que si te sientes incómoda entonces podremos regresar, le diré a Alessandro que nos devolvamos." El Omega intentaba animar a Poli que los acompañara a la gran fiesta que su grupo de amigos beta habían organizado.

"No quiero arruinarles el momento, en verdad no tengo ganas de ir, vayan y diviértanse." Ander no aceptaría un no por respuesta por lo que siguió insistiendole hasta que la omega acepto. "Pero solo iremos un rato y nos devolveremos, ¿Si?"

"Si, si, lo que digas." El ojiazul aplaudió emocionado levantándose de un saltó de la cama. "Ok, cámbiate y ponte guapa, más de lo que estás, tal vez un sexy alfa te anude está noche."

"Cállate, solo voy porque estas insistiendo, no me molestes." Lo vió salir de la habitación y con todo el pesar del mundo en sus hombros se pudo levantar. Caminó hacia su armario tomando lo primero que su campo de visión encontró. Un vestido verde que le quedaba justo en los muslos juntó una chaqueta de mezclilla.

Ya arreglada se vió en el espejo que colgaba en su pared. Hizo una media coleta con su ondulado cabello castaño asintiendo satisfecha con el resultado.

La puerta sonó y la cara de Ander se asomó por el pequeño espacio que había abierto. "Llegó Alessandro, vámonos." Poli lo escucho tomando su pequeño bolso y terminando de abrochar sus viejos converses.

Al bajar las escaleras se encontró con su amigo comiendose a besos a su alto y fornido alfa, ambos totalmente entregados al momento que no se percataron ni un momento de su presencia. Carraspeó con fuerza lamentando que tuvieran que separarse. "No deberían comer en frente de los pobres, es de mala educación."

"Bueno, no es mi culpa que seas tan amargada y no tengas con quién comer." Alessandro soltó una suave risa ante el comentario de su Omega y negó tomando la mano de Ander para salir de la casa.

En el auto Poli ya se estaba arrepentido de haber venido, sentía que estaba haciendo un mal trío y eso la incomodaba. Su omega soltó un leve gemido lo que ocasionó que se hiciera chiquita en el asiento trasero intentando calmarse. Odiaba la gente, odiaba la musica, odiaba el alcohol, odiaba las fiestas en todo su explendor.

"Llegamos." Canturreo ander cuando su alfa estacionó el auto un tanto lejos de la casa que retumbaba con el sonido tan alto de la música, habían demasiados vehículos.

La omega siguió a la pareja unos metros por detrás, no queriendo inoportunar su momento, se iban cuchicheando y sabía que era de mala educación escuchar conversaciones ajenas.

Al entrar a la casa de dos pisos apretó los ojos con fuerza abrazándose. El olor a cigarro y alcohol inundó sus fosas nasales. Intento seguir el paso de la pareja, pero parecía una misión imposible con tanta gente. "Mierda." Se tambaleó cuándo un grupo de chicos que iban corriendo la aventaron. Al levantar la vista habia ya perdido a sus acompañantes.

Totalmente desorientada caminó pidiendo permiso y moviendo unos cuerpos para poder pasar. Se sentía sofocada y sus nervios ya estaban alterados, podía sentír a Lili sollozar en sus adentros.

Sus ojos se abrieron como platos al ver a un alfa mordiendo el cuello de un Omega, los hilos de sangre resbalan manchando su playera blanca. Estaba aterrada en éste momento y decidido que tenía que salir de ahí antes de que viera algo peor. Se giró en sus propios talones volviendo su camino hasta al fin salir. Aspiró con fuerza sintiendo como el aire le faltaba.

"¿Vienes sola?" Poli se tensó al sentír un aliento chocar contra su oído. El aroma a anís la mareo más si es que era posible, era un olor demasiado fuerte y predominante.

"No, yo vengo con mis amigos...pero creo que los perdí, la verdad es que no se bien." Empezó a jugar con sus dedos sintiendo las mejillas calientes. Sus feromonas desprendieron un olor más intenso que no pasó por desapercibido el alfa que la había acechado.

harry styles; one shots Donde viven las historias. Descúbrelo ahora