Porque no somos capaces de conectar igual con la gente, aunque estén a nuestro lado hay un vacío de insatisfacción que permanece allí. A veces es imperceptible, esos momentos son en los que nos sentimos completamente cómodos, momentos los cuales no hay ni un mal pensamiento recorriendo nuestro interior. Si que somos complicados no? Nos cuesta conformarnos con lo que tenemos, a veces no es lo que tienes sino como lo ves. Cualquier compañía puede ser maravillosa si la miras con buenos ojos.
A veces me siento vacío por dentro, como si no tuviera una meta la cual cruzar, eso es duro. Levantarme cada día resulta agotador, ya que luchar diariamente contra mi mente no es fácil. Somos seres emocionales, atados a los sentimientos, aunque eso es lo que nos caracteriza y nos hace únicos. Aunque hay veces que esos sentimientos acaban pesando tanto que llevarlos encima se nos complica, y preferimos desecharlos y dejarlos en ese rincón oscuro el cual nunca miramos. Me gusta vivir cada instante, lo malo es que me gustaría que esos momentos no fueran únicamente para mi. Me gusta tener mis momentos, aunque hay veces que compartirlos y vivirlos con alguien al lado los hace insuperables. Supongo que el problema de incompatibilidad y insatisfacción reside en mis metas, al no fijarme objetivos no puedo estructurar bien lo que quiero, eso se refleja a la hora de relacionarme. Ojalá despertar con una visión de mi futuro, espero que esta noche pueda soñar lo que quiero y en un futuro centrarme en ello, ahora simplemente voy a dormir para descansar mi mente. Espero que mañana no se me olvide lo que pensé ayer, no puedo simplemente despertar y hacer un reset. Tengo que despertar y permanecer en el punto en el que lo dejé, así siempre avanzaré y veré el camino.