Parte 1

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pov chaeyoung 

Afuera llovía, era una tarde poco común, era una otoñal tarde naranja, la oscura sabana de la noche casi caía, los árboles casi se quedaban sin hojas, el invierno se acercaba, estaba abrazada a ella sobre el suave y cómodo sofá café de su casa, tenía la cabeza recargada sobre sus pechos, podía escuchar los latidos de su corazón, y su lenta, profunda y calmada respiración, ambas  sostieniamos   una taza de chocolate caliente, ya era más invierno que otoño, y el frío se sentía.

Cuando Mina  llegó a mi vida aprendí lo que eran los celos, lo que era el amor. No sabía lo que era el dolor hasta que ella llegó. Me enseñó a arreglar todo con un “ hay mejor besame”; hasta que llegó supe escribir correctamente, claro, como ella tenía una excelente ortografía. Reprobé una materia cuando ella llegó, sin embargo, salí con promedio de nueve punto dos, porque claro, Mina  me ayudó con mi redacción. Al sentir que nos acordabamos que hay cosas más bellas y simples que una tonta pelea por mi imprudencia. Dejar los vicios, dejar a "mis malas amigas", dejar mis malos hábitos y mi mal vocabulario, todo eso, cuando ella  llegó. Mi vida se hizo más divertida, todo el día sonreía. El frío desaparecio de mi, mi frialdad se volvió cálida. Odiaba lo cursi, hasta que la chica  y... me volví detallista. Odiaba los videojuegos. Mi insomnio, mi adicción por el chocolate, mis pesadillas y mis dulces sueños, todo eso cuando ella llegó.

Terminé mi chocolate caliente, Mina  me retiró la taza de mis  manos y la puso sobre la mesa junto con la suya, estábamos frente a la chimenea, el frío era abrazador. Mi chica  comenzó a acariciar mi cabello de una manera tan dulce y tierna. En la habitación solo se escuchaban nuestras respiraciones, y las gotas de lluvia al estamparse contra las ventanas. Mina  puso una de sus grandes y delicadas manos en mi mejilla y me hizo voltear a mirarla. Sus hermosos y perfectos ojos avellana  me capturaban por completo, podía pasar horas, días, años; perdida mirándolos y jamás aburrirme de ellos. Sus labios estaban rojos  por el frío y entre abiertos, aun así lucían bellísimos, parecían más grandes de lo normal. Su nariz estaba roja igual por el frío, su perfecta y recta nariz a un perfecto tamaño, para un perfecto rostro como el de ella.

Las palabras sobraban en ese momento, el tiempo se detuvo, el mundo era nuestro. Con una extraordinaria lentitud se acercó a mí, podía sentir su aliento achocolatado sobre mi nariz, su respiración tranquila y serena. Cubrió mis labios con los suyos. Poco a poco comenzó a moverlos, haciéndome despertar de aquel estado de petrificación momentánea. El tiempo se volvía loco, a veces parecía detenerse, otras veces parecía acelerar, y otras tantas parecería no existir.

Abrí un poco más los labios para dar acceso completo a ella. Siguió acariciando mi mejilla con una mano y la otra la puso en mi cintura. Yo me abrace a su cuello y jugaba con su sedosa cabellera negra , me fui encimando  sobre su regazo hasta estar sentada a horcajadas sobre ella.

Me tomó en sus fuertes brazos y caminó conmigo hasta su cuarto, el olor de aquella  habitación inundó mis fosas nasales. El olor a vainilla  se percibía en todas partes, me colocó cuidadosamente sobre su cama y luego ella  se acomodo sobre mi, sin lastimarme. El beso fue aumentando de velocidad sin perder magia, sin perder ese toque de amor y ternura que siempre me demostraba.

Beso mis labios por última vez, luego mi frente, luego beso mis mejillas, mi barbilla y paro en mi cuello. Besaba mi cuello tan delicadamente, pero al mismo tiempo tan sensualmente, que me hizo estremecer. Las sensaciones que me hacia sentir, eran... tan... unicas y nuevas para mi. Me sento y metio una mano debajo de mi blusa y acaricio un costado de mi cintura cariñosamente. Fue subiendo mi blusa con calma y tranquilidad como si el tiempo fuera nuestro, hasta que logro sacarla por completo y la arrojo al suelo. Agradesco que el calentador estuviera prendido en su habitacion, si no ya estaria hecha un hielo.

Te Amo (Michaeng)(one shots ) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora