17.- Enojo

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La noche habría caído empezando a dejar ver los destellos de luz

Douma: -empezaría a sentir una luz llegar a sus ojos por lo que lo abriría los ojos con un tanto de fastidio- QUE MIERDA?! -vería que estaba sobre el pecho del pelinegro totalmente desnudó por lo que se levantaría con bastante dolor en la cadera-

Kokushibo: -al escuchar el grito del pelirrubio se habría despertado- Buenos días cariño -veía hacia el pelirrubio con una sonrisa-

Douma: donde está mi maldita ropa!! -estaría bastante furioso-

Kokushibo: -rodaría sus ojos- solo ven a dormir aún es temprano -diría bastante irritado-

Douma: dormir con alguien como tú..no lo creo -haría un gesto de desagrado, mientras caminaba en busca de su ropa-

Kokushibo: eso no decías en la noche -soltaría una carcajada- o no me digas que lo olvidaste

Douma: lo único que recuerdo es que me diste algo de un estupido frasco y me empecé a marear... -guardaría un poco de silencio- maldito cerdo...

Kokushibo: -mostraría una sonrisa- di lo que quieras aún así lo disfrutaste

Douma: -seguiría buscando su ropa, vería que había unas prendas por lo que las tomaría y se las pondría-

Kokushibo: no me digas que el gato te comió la lengua -se pondría de pie, no recibiría respuesta del pelirrubio- aww pero si está enojado -caminaría hacia el pelirrubio-

Douma: aléjate de mi -retrocedería- Prefiero estar con tu jefe que parece muerto que contigo

Kokushibo: -haría una mueca- qué pena, estarás conmigo hasta el tiempo que yo quiera -diría en tono burlón mientras seguía acercándose a él hasta lograr acorarlarlo con sus brazos-

Douma: -haría una mueca de disgusto- porque no mejor me matas eso sería más fácil para ambos

Kokushibo: porque te tengo que mantener vivo, al menos hasta ahora -pondría ambas manos en la cadera del contrario y lo acercaría hacia el-

Douma: -intentaría quitar las mano del pelinegro pero este no podría- agh!! No entiendo que putas quier-... -recibirá un beso del pelinegro, este intentaria jalar su cabeza hacia atrás pero el pelinegro habría puesto su mano en su cabeza por lo que mordería el labio del pelinegro con fuerza logrando hacer que le saliera sangre-

Kokushibo: -separaría sus labios del pelirrubio- eres un maldito!! -pondría sus manos en sus labios-

Douma: -al ver lo ocasionado se iría de ahí pero el pelinegro lo habría tomado de la muñeca- SUÉLTAME!!

Kokushibo: si dices no querer verme está bien -soltaría al pelirrubio y tomaría su ropa para cambiarse con rapidez- te dejare solo aquí sin comida ni agua y vendrán unas personas aquí a satisfacer sus necesidades contigo, regresaré cuando se me plazca -saldría de aquel cuarto y lo dejaría encerrado-

Douma: -estaría confundido y alegre al saber que ya no estaría el pelinegro consigo- espero no regrese -se volvería a acostar en la cama para tomar una siesta-

Las horas habrían pasado y el estómago del pelirrubio empezaría a rugir debido a que ya tenía algo de tiempo que no comía algo. Por lo que le sería imposible dormir, buscaría otra forma de poder distraerse hasta que escuchó un ruido de la puerta, había un hombre caminando hacia donde está el pelirrubio. Douma se encontraba un tanto asustado por la presencia de la persona no sabía qué hacer hasta que llegó el hombre hacia él y lo tomo del hombro

???: qué bonito niñito, si era como prometió ese engreído -mostraría una sonrisa-

Douma: no soy ningún niñito, y de que engreído hablamos -levantaría una de sus cejas-

???: de quien más hablaría si es kokushibo la persona más engreída del mundo, pero eso no es relevante ahora solo vengo por lo que pague -besaría al pelirrubio-

Douma al darse cuenta de lo que se trataba intentaba alejarse de ese tipo pero este solo lo golpeaba cada vez que lo intentaba, aquella semana fueron lo mismo dos personas siempre llegaban al cuarto para acostarse con el pelirrubio mientras que él pelirrubio estaba lleno de mordidas y golpes, al igual que estaba casi muerto de hambre y sed quedando así sin energía ni fuerzas. La puerta habría sido abierta esta vez dejando ver a alguien conocido...

Kokushibo: valla que te ves mal -soltaría una risa- espero recuerdes que tú debes seguir lo que yo diga, entendiste?

Douma: -vería hacia el pelinegro para después voltear a mirar hacia otro lado así ignorándolo-

Kokushibo: -al no recibir respuesta lo tomaría del cuello- te dije que si entendiste?!

Douma: -soltaría un quejido- s-suéltame! -pondría sus manos sobre la mano del contrario para intentar zafarse de ahí-

Kokushibo: al parecer nunca entenderás que nadie vendrá a tu rescate -pondría mas fuerza sobre su mano- así que si  no quieres morir seguirás lo que yo te ordene, entendiste

Douma: -empezaría a desesperarse debido a que se estaba quedando cada vez sin aire- agh.. -soltaría algunos sonidos de dolor hasta poder tomar algo de aire para hablar- e-esta bien..!

Kokushibo: -al escuchar esas palabras soltaría al pelirrubio-

Douma: -se tomaría del cuello e intentaría volver a recuperar el aire-

Kokushibo: por cierto -pondría su mano sobre el mentón del contrario para alzarlo y hacer que lo vea- si te vuelves a negar a hacer lo que yo te pida entonces tus queridos hijos tomarán tu lugar

Douma: -estaría un tanto aterrorizado por el saber cómo estaban sus hijos- más te vale que estén bien -lo vería con un gesto molesto-

Kokushibo: espera, nosotros no somos esas personas que maltratan niños -diría en forma de ofensa- lo llegamos a hacer cuando sus padres no quieren apoyar -mostraría una sonrisa-

Douma: -seguiría estando enfadado- si llegó a ver que los golpean no dire ninguna palabra sobre lo que quieren saber de yoriichi ineptos -diría con disgusto y enfado-

Kokushibo: uy que amenazado me siento -acercaría su rostro al del pelirrubio- si no quieres que nada les pase entonces pórtate como un bu-... -se escucharía el estómago del contrario rugir de hambre- aww tienes hambre -diría de forma burlona-

Douma: -pondría una de sus manos sobre su estómago sin responder nada-

Kokushibo: -cambiaria su gesto a uno molesto para soltar el mentón del pelirrubio e ir hacia la puerta

Douma: -vería el cambio rápido de actitud del pelinegro haciéndolo preocuparse- e-espera...

Kokushibo: -se detendría en la puerta y voltearía a ver al pelirrubio- que quieres

Douma: a donde vas... -preguntaría un tanto temeroso por la respuesta-

Kokushibo: -soltaría una pequeña risa y saldría de el lugar-

¿Enemigos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora