pecado

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28 de febrero 1975

Levana Pov

Siento su respiración contra mi oído, suplico por más hasta que...

Mañana de 1 de marzo 1975

Cruzando el Gran patio lo observo juguetear con la coleta que llevaba anoche.

-Hola primo- bromeo mientras me acerco, cuando posa su mirada en mi la hace de una forma la cual me produce un rubor en mis mejillas -Para de verme así- pido apenada

-Ayer no pedias lo mismo "Primita"- se defiende burlándome.

25 de diciembre 1994

Una luz pega en mi cara, por lo que genera que de a poco abra mis ojos. Justo en el momento que me iba a retorcer en las sábanas, me percato que sobre mi cintura se encuentra un brazo aferrado a mí. ¿Qué mierda hice anoche?

Al girarme un poco, noto del otro lado de la cama un Sirius profundamente dormido, maldigo en silencio, mientras quito lentamente su brazo de mí y empiezo a observar en toda la habitación para encontrar todas mis pertenencias.

Rápidamente las tomo y me las coloco, justo en el momento que oigo unas voces detrás de la puerta, por lo que ordeno con un movimiento de varita las pertenecías de él, para que la escena no sea sospechosa y me desaparezco, trasladándome a mi habitación.

Me dejo caer en mi cama, ¿en que estabas pensando Levana?, no encuentro el motivo por el cual me deje llevar, pero tengo que ver cómo me enfrentare a él. Por ahora, lo hare de la forma menos adulta que conozco, evitándolo a más no poder.

Me dirijo al baño para darme una buena ducha y si tengo suerte, me resbalare y perderé la memoria, eso ayudaría.

Sirius Pov

Unas voces me despiertan, sin abrir los ojos busco el tacto de la piel de ella, pero al no sentirlo abro los ojos de golpe, no está.

Al volver a escuchar las voces me levanto rápidamente y tomo el pantalón colocándomelo con rapidez.

Al abrir la puerta, me topo con Felicitas y Scorpius, este último al ver que no llevo nada en la parte superior, le cubre con sus manos la visión de ella y entregándome una mirada de reproche.

-L-lo siento ehh- busco con la vista mi bata y me la coloco- Listo.

-Estas fuera de forma- bromea Felicitas mientras se ata una bota, a lo que la miro indignado.

-Feliz navidad, para ustedes también - mientras me acerco para abrazarlos, pero a dúo me levantan la mano frenándome.

-Feliz navidad pa, pero preferimos que estes vestido bien- asiento dándoles la razón - te vemos a bajo- finaliza mientras se retiran de mi cuarto.

Cuando se van, me siento frustrado en el borde de la cama. Coloco ambas palmas de mis manos en mi cara, para certificar que lo que tanto anhelaba anoche sucedió.

La sentí cerca mío otra vez.

Levana pov

Camino por uno de los pasillos en busca de mis niños, pero accidentalmente choco con otra persona, deseando que sea el detestable Severus, pero cuando veo la mano estirándose en mi dirección y veo el anillo que porta, maldigo para mis adentros.

-Buen día Lev- dice con picardía, a lo que solo asiento mientras de lama gana tomo su mano, al terminar de acomodarme iba a retomar mi búsqueda, hasta que detiene mi paso su agarre -Podrías no ignorar lo que paso anoche, por el amor a Merlín.

Pero antes de defenderme o que cualquier tipo de sonido saliera de mi boca, unas personas nos sorprenden.

-Sirius- dice una mujer

- ¡Madre! - dicen dos voces observándome.

Lentamente me suelto del agarre mientras me acerco a ellos, mientras veo como de reojo la dama se acerca a Sirius y deposita un beso en su mejilla. Noto como Scorpius se molesta ante tal acto, por lo que intento llevármelos a otra parte, pero la voz de Sirius me lo impide.

-Sra Price.

-Señorita- corrige con una voz chillona.

-Claro... le presento a mi esposa e hijos-dice en tono orgulloso, ambos me miran en forma de burla ante la declaración de Sirius, hijo de perra. Tomo aire antes de voltearme y hacer que hagan lo mismo mis pequeños.

-Levana Black, un placer- sonrió lo más falsamente que puedo, pero de a poco pasa a ser una genuina al ver la expresión perpleja de ella -Oh cierto, ella es Felicitas y él es Scorpius.

Parpadea un par de veces para captar lo que acaba de oír -Creí que era padre soltero Sr, Black- niega lentamente mientras me sonríe con complicidad - Bien, le dejo esto. Son los balances de venta del último modelo- apenada hace una reverencia mientras se marchan.

Al ver que se encuentra lo bastante lejos, Sirius rompe el silencio con una carcajada la cual ninguno pudimos negarnos a acompañarlo.

Theo aparece por el mismo pasillo en el cual la dama se perdió -No se que le paso, pero estaba roja cual tomate. ¡Ay que bonito!, me dejan plantado y ni siquiera invitan para una broma.

-En la próxima será sobrino- Sirius palmea su hombro con gracia y es la primera vez que Theo no se niega a él, quizás su rencor ha disminuido.

Mientras nos encaminamos, Felicitas baja su ritmo y hace un gesto para que haga lo mismo, al hacerlo disimuladamente me entrega mi pendiente, recién me percato de la falta de uno, mi cara de confusión se hizo notoria -Estaba en su habitación y no, no le diré nada- apuntando a la dirección de mi hijo.

Me equivoque, no puedo evitar hablar de lo que paso y más si de por medio están ellos.

Las cosas iban demasiado bien para cometer un error nuevamente, si lo hago perderé de nuevo.

...

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A.N.P

PERDIDA || Sirius BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora