Anime: Jujutsu Kaisen
Personaje: Gojo Satoru.
Extensión: Drabble.
Género: No especificado.
Advertencia: Leve referencia sexual.FC:
Todos los creditos correspondientes a su autor.
Todos conocían a Gojo Satoru como un hombre simpático y de actitud despreocupada. Nunca se le había oído hablar mal de alguien, a excepción de los viejos superiores, ni tratar mal a otro. Sin embargo, cuando cierto sujeto entraba en su campo de vista Gojo parecía transformarse; su sonrisa desaparecía, su cuerpo aparentaba tensarse y se ponía a la defensiva. Justo como ahora.
- ¡Hey, chicos! -Itadori, Megumi y Nobara voltearon al escuchar la ya conocida voz. - Solo daba una vuelta por aquí y los vi, no podría no saludar a mis alumnos favoritos -el joven adulto de cabellos azulados sonrió.
- Aeri-sensei -Itadori fue el primero en hablar- No lo veo hace días, ¿Donde anduvo? -elevó una de sus cejas con curiosidad. ¿Para que mentir? Siempre era divertido escuchar las anécdotas del mayor.
- Ahora que lo dices, Itadori -Nobara miró con el ceño fruncido a Aeri. - Siempre anda desaparecido, sensei.
- ¿Sí? -puso una de sus manos en su barbilla.- La vida de un adulto implica muchas responsabilidades, ¿verdad, Gojo? -finalmente se giró hacia el peli blanco suavizando su mirada.
- No creo que sea tu caso -respondió serio el mayor, sorprendiendo un poco a sus alumnos. - Ahora, si nos disculpas, estamos en medio de un entrenamiento -Gojo colocó una de sus manos en el hombro de Megumi, acercándose un poco a la pequeña media ronda que hicieron alrededor de Aeri. - Vayan a seguir con el entrenamiento -los tres jóvenes se despidieron del otro adulto y se alejaron juntos.
- Sabes... -Gojo frunció el ceño al darse cuenta que Aeri se dirigía a él- no tienes que tratarme así solo porqué no eres una de mis "responsabilidades" -sintió un cosquilleo en su columna al escuchar la voz de Aeri.
Se quedó en silencio unos segundos, ni su respiración se lograba oír. Aeri sabía que Gojo lo odiaba, ya se lo había dicho varias veces, pero no sabía el porqué, ni tampoco le importaba, era divertido verlo a la defensiva cuando estaba cerca de él.
- Por cierto, -su tono de voz cambió drásticamente- dile luego a los chicos que quiero salir a comer con ellos -se formó una suave sonrisa en su rostro. Gojo asintió sin agregar nada más, esperando que Aeri se fuera, pero este parecía no tener la más mínima intención, como si esperara algo.
- Lárgate de una vez -su voz sonó más arisca de lo que quería, algo que disgusto mucho a su compañero.
Otra vez el silencio se formó entre ambos, algo tenso esta vez, lo notaría cualquiera. El peliblanco, un poco incómodo, sintiendo que tal vez fue muy brusco, decidió insistir, o bueno, intentarlo.
- Y...
- También puedes venir -el rostro de Gojo se suavizó al escucharlo, creo que era la primera vez que el otro le invitaba a esas salidas que organizaba con los menores. Obviamente lo rechazaría.
- No me inte...
- Así me coges luego de que ellos se vayan.
El rostro de Gojo era una auténtica obra. Podría parecer un chiste, otro intento de Aeri de enojar a Gojo -cosa que siempre lograba-, pero Gojo conocía hace mucho al peli azul, y sabía, por el tono de voz usado en esa oración, que él menor no bromeaba. Y mierda, ahora sí que iría.