Clavo

Nombre

Las cosas avanzaron demasiado rápido. 

No tanto porque hubiese amanecido en su cama sin saber su nombre, aun en la preparatoria eso no era tan raro. 

La cosa fue que el solo apareció en mi vida como un huracán,  aun no recordaba su nombre y aun así ya estaba fantaseando con el. 

Sus besos, sus caricias, su mirada y sobre todo su sonrisa. 

-Fue un beso de peda- dijo Mariana para sacarme de mi ensoñación. 

-No fue solo un beso y no fue solo una vez- respondí ligeramente a la defensiva. 

-Bueno amiga pero no hace mucho la diferencia si aun no te ha mandado ni un mensaje-contesto. 

Y tenia razón, después de escabullirme de su casa aquella mañana, no había vuelto a saber mas de el. No quería ser la primera en enviarle un mensaje, de cierto modo quería ver otra vez la pequeña insistencia que tuvo conmigo cuando el me busco a mi. 

Pero claramente no iba a pasar. 

-¿Ya averiguaste su nombre?- pregunto ella devolviéndome a la realidad una vez mas. 

-Ari no me quiere decir- respondí. -Dice que el es un buen chico y que yo solo me lo quiero coger.- mi amiga rio a carcajadas, tan escandalosas que por un momento todo el mundo nos volteo a ver. 

-¿Por que rayos Ari piensa eso de ti?- pregunto, luego se quedo callada un momento. -Aunque ya te lo cogiste. Soltó riendo. 

Yo rodee los ojos y seguí caminando. 

Nos juntamos con nuestros demás amigos y en lo que decidían que ir a comer después de la clase, yo me puse a escribir una pequeña disculpa en el celular. 

No le debía nada en realidad, pero en su defensa, yo ni siquiera me había despedido. Ari no hablaba mucho de el, pero por lo poco que me había contado el era una persona sensible. 

Me concentre tanto en el teléfono que no sentí que una persona se había parado justo detrás de mi hasta que me toco el hombro. 

Voltee a verlo y en efecto era la misma persona, solo lo había visto de noche y la luz del sol definitivamente lo hacían ver aun mejor. Los ojos se le veían mas claros, casi llegando a un color miel, era realmente guapo. 

Me sonroje al darme cuenta de que estaba leyendo la disculpa que escribí en mi teléfono. 

El sonrió y por un momento no supe que decir, lo ignore mientras seguíamos con mis amigos, tratando de tranquilizar momentáneamente mi corazón. 

¿Quién se enamora en una peda? 

Los latidos se oían en mis oídos, entonces escuche que se iba. 

-Yo me voy contigo- dije en voz alta y sentí las miradas picaras de mi Mariana y claramente de Ari también. 

El asintió, nos despedimos y nos fuimos caminando a la estación.

-¿Esta vez no traes auto?- pregunte y el negó con la cabeza. -¿Pasaste a ver a Ari? ¿o que hacías por aquí?-

-Estudio aquí- respondió y a mi se me cayo la quijada. 

-No es cierto, te hubiera visto

-De verdad, estoy en el mismo grupo que Ari- sentí mi rostro arder de la vergüenza. 

-¿Nos vimos antes de que Ari nos presentara?- pregunte y el asintió. 

-Una vez perdiste tu celular y yo lo encontré, otra vez iba pasando y tu soltabas algunas cosas sin sentido, aunque te la perdono porque parecías bastante ebria la segunda vez. 

Nuevamente me sonroje. Primero por que el recordaba las veces que nos habíamos visto antes y yo no, ni siquiera recordaba su NOMBRE. 

-¿Te puedo preguntar algo?- dije bastante bajo- pero no te vayas a enojar. 

-Claro- respondió. 

-¿Como te llamas?- pregunte y el se detuvo, me miro desconcertado. 

Pude ver la pequeña lucha interna que tenia en su cabeza, y no me respondió de inmediato. 

-¿Es enserio?- pregunto y yo asentí con la cabeza. - Daniel.

Yo sonreí, saque mi teléfono y guarde el contacto. 

Después del pequeño momento de incomodidad seguimos hablando y a propósito note que el en ningún momento saco el tema de nosotros en el bar. 

Llegamos a la estación y el debía regresar unas cuadras para tomar su autobús. 

Compre mi boleto y justo cuando iba a pasar se me ocurrió lo que en ese momento pareció una excelente idea. 

Tome todo el valor que tenia, respire profundamente y corrí hacia el, lo abrace del cuello y de puntitas le plante un beso en los labios. 

Después de mi pequeña escena y que volviera la cobardía a mi cabeza, volví a correr, esta vez en dirección opuesta y sin voltear a ver su reacción. 

Estaba ligeramente asustada. No era la primera vez que nos besábamos pero si estando sobrios. Me metí en el primer metro que llego y silencie sus notificaciones por un día entero. 

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Holis

NO ES UN FANFIC, me gusto el nombre Daniel y por eso lo puse. 

Solo me inspire en la canción de Wiplash pero la historia es mia, la verdad es una muy especial y muy personal, espero que les guste y que le den una oportunidad a los demás capítulos porque se viene lo bueno. 

Sigan la historia y siganme 

Se aceptan quejas y sugerencias 

Aqui estoy para aprender a escribir mejor. 

Preguntaaaaa

¿alguna vez han estado en una relacion toxica?