Prologo. ¿Esto se puede poner peor?

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Dayana caminaba por lo que en su tiempo eran las calles del pueblo de Huimanguillo y ahora no son mas que pequeños caminos de tierra llenos de basura y cadáveres en descomposición. Se acerco a uno de los cadáveres que parecía fresco, si no fuese por el olor se podría pensar que aquel hombre de aproximadamente unos 30 años de piel morena y cabello corto obscuro estaría dormido en medio del camino, pero fue suficiente para Dayana con moverlo un poco para darse cuenta que aquel trotamundos había dejado de trotar este plano, las normas morales del antiguo mundo te harían cuestionarte si robarle las pertenencias a un muerto estaría bien, pero en un mundo asolado por el apocalipsis climático donde la diferencia entre un cádaver en el suelo y una persona caminando es solamente un poco de agua en la cantimplora o alguna lata de comida y muchas veces la gente muere con estas cosas en sus bolsillos y Dayana lo sabe muy bien debido a ser una baby infértil.

Los baby infértil es el nombre que recibieron todos aquellos niños que nacieron de mujeres embarazadas antes de que la atmosfera se recubriera de aquel extraño químico que provoco que las hormonas de las mujeres se volvieran un caos causando infertilidad en absolutamente todas las mujeres, las ultimas oleadas de investigadores y científicos comentaron que en realidad la atmosfera no fue la culpable, que lo único que cambio en la atmosfera fue en la densidad y que aquella extraña neblina que recubría el mundo en realidad no fue la culpable de la esterilización de la humanidad, aquellos científicos culpaban al abuso de antidepresivos que se genero en los primeros años del comienzo del apocalipsis, cuando la humanidad se volvió adicta al consumo de antidepresivos para poder enfrentar el fin de la sociedad como la conocíamos. en el año 4 D.A (después del apocalipsis) cuando la escases de antidepresivos asolo a la humanidad a la par la extraña neblina apareció y desde ese momento ninguna mujer volvió a embarazarse y todos los niños nacidos de dicho evento nacieron infértiles producto de los cambios hormonales provocados por el consumo excesivo de esta droga. Pero a pesar de que la evidencia científica demostraba todo esto, las personas decidieron culpar a la atmosfera y esa extraña neblina, porque si no iban a aceptar la culpa por el apocalipsis la humanidad tampoco iba a hacerse responsable por eliminar la única forma de sobrevivir que tenían.

Una lata de sopa pollo, dos barras de chocolate y un poco de agua en su cantimplora era todo lo que Dayana logro conseguir de su saqueo, podría parecer poco pero eso podría ser la comida de toda una semana e incluso podría ser mas de lo que cualquier otro habría podido comer en toda su vida en el nuevo mundo, hubo un tiempo cuando la sociedad se daba el gusto de seleccionar su comida y cuestionar aquellas culturas donde comían animales como ratas, ranas y las partes de los animales que nadie se atrevería a comer, como la panza de la vaca o el corazón de los pollos, aunque en el nuevo mundo donde comer insectos te daría los nutrientes necesarios para sobrevivir otro día los dotes de cocina de aquellos a quienes cuestionaron en tiempos pasados eran habilidades que se atesoraban, una rana en salsa de soya con chiles secos definitivamente sabría mejor que simplemente cocinarla al fuego con un poco de sal y jugo de limón si tenias la suficiente suerte de encontrar la sal y el limón o la rana. Mientras Dayana guardaba todo en su mochila pudo observar a una pequeña rata que había comenzado a devorar los ojos de aquel cuerpo inerte que había asaltado hace unos momentos y por alguna extraña razón no podía dejar de mirar aquella escena, aquel animal simplemente ignoraba o no había notado la presencia de Dayana y continuaba su festín, mientras la sangre teñía su pelaje gris la rata comenzaba a ingresar en el cráneo del cuerpo y así continuo hasta que lo único visible era su cola que sobresalía por la cuenca vacía del ojo y se movía de un lado a otro. Un fuerte estruendo se escucho a lo lejos sacando a Dayana de su trance lo que inmediatamente la hizo voltear en busca del sonido y no tuvo que buscar mucho ya que pudo ver como un antiguo cartel que anunciaba una bebida alcohólica había caído desde lo alto de un edificio hacia un montón de basura provocando que un nido de ratas que habían elegido ese lugar como su hogar se alborotara y saliera de su madriguera, aquellas ratas atraídas por el aroma a sangre se dirigieron hacia el cádaver que yacía a un lado de Dayana y al ver esto logro reaccionar y corrió lejos del peligro, mientras se alejaba logro mirar como aquel cuerpo que la provisiono de alimentos ahora se convertía en una montaña de ratas que peleaban por devorar su carne y entrañas.

Después de la nada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora