Epílogo

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Leer con la canción de multimedia.

Pequeña... no puedo creer que ya paso un año desde tu muerte. Por las noches tengo pesadillas y en todas es lo mismo, no puedo salvarte, justo como en realidad paso. Lamento haberte fallado, lamento no haberte salvado, sólo te hundí más y te dejé ahí peor de cómo estabas, no puedo dejar de sentirme culpable. Sé que ya no sirve de nada pero te diré quien soy, me llamo Santiago, quizá ni siquiera sepas quién soy porqué nadie sabe quién soy, siempre me siento en los últimos lugares, nunca levanto la mano para participar, no hablo con nadie que no sea Andrés (mi mejor amigo en el mundo), me corto desde los 14 y aún no sé como detenerme; mi cabello es oscuro y siempre esta desordenado, mi piel es muy pálida y mis ojos son verdes o algo parecido, siempre uso sudaderas o casi siempre, creo que es obvio el porqué las uso casi todo el tiempo, odio el chocolate porqué soy alérgico y amo la mermelada de durazno, toco la guitarra y amo cantar. Soy todo un antisocial, y soy un suicida, desearía haberte salvado, haber sido suficientemente fuerte por los dos. Me enamoré de ti desde la primera vez que te vi en la clase de biología, tu voz, tus ojos, tus gestos, tu cabello, tu ropa, todo en ti me pareció perfecto, incluso esos ligeros y finos cortes que atravesaban tu frágil piel, eres el amor de mí vida y te dejé morir, te dejé caer, sólo te dejé a tu surte y no tienes la mínima idea de cuán arrepentido estoy por no haber sido más de lo que tú necesitabas. Te amo tanto y quería escribirlo una última vez, jamás te olvidaré, nunca olvidaré los pequeños rasgos que te hacían ser tan especial, tu fina letra...esa que me vuelve loco cada vez que leo las notas que me diste, tus gestos al escuchar música, tu ligera y suave risa ,que aunque casi nunca escuchaba, se ha quedado grabada en mí memoria, tus pucheros cuando decían algo que te heria pero no querías llorar, todo sigue en mi mente y todo esta fresco, cómo sí hace poco te hubiera visto hacer todo eso. Te amo mucho, eres lo mejor que me pudo haber pasado y siento mucho haber sido tan poca cosa para ti, tu no merecías que alguien cómo yo llegará a arruinar tu vida aún más. Lo siento y te amo.

Tu eterno enamorado, Santiago.

Notas para una suicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora