Capítulo 2

372 5 0
                                    

Emma

Oí la puerta y con ella voces desconocidas y decidí bajar a ver de quienes eran esas voces y cuando llegue a la entrada vi a una pareja de unos 40 años. La mujer parecía una de esas madres cariñosas y el padre se notaba que era una persona seria pero a pesar de eso parecía majo aunque no entendía que hacía aquí con traje y a estas horas.

-Emma, ¿no vas a saludarlos?- me dijo mi padre.

-No te preocupes Ted, no pasa nada cariño. Yo soy Lilian pero llámame Lili- sonrió al decirme esto, había acertado totalmente con ella.

-Soy Emma. ¿Sois los vecinos verdad?

-Sí, somos tus vecinos Emma. Espero que no hagas muchas fiestas si no nos invistas- me guiñó el ojo el hombre con traje y no pude contener la risa cuando me lo dijo.- Ah y soy Charlie, encantado.

Estuvimos hablando un rato sobre la ciudad y otras cosas triviales a las que no prestaba mucha atención hasta que alguien llamó a Lili.

-Era nuestro hijo preguntado cuando volveremos para hacerle la cena así que creo que va siendo hora de irnos- dijo Lili aunque ahora me interesaba más saber cosas sobre su hijo pero no iba a preguntarla nada.- Hasta luego.

-Adiós- respondimos mi padre y yo. Como agradecía que Dana se hubiera ido a donde quisiera que se hubiese ido gracias a eso he tenido una buena tarde con mi padre que no tenía desde hace tiempo.
Había una cosa que no dejaba de pasar por mi cabeza y era el hijo de Lili y Charlie. ¿Tendrá mi edad o será más mayor? ¿Es tan borde como parece? ¿Vendrá aquí algún día o quizás lo vea mañana en clase? ¿Cómo se llama? Y lo principal, ¿ese, ahora, chico misterioso me conoce? ¿Tendrá tanta curiosidad por conocerme a mí como yo de conocerlo a él?
Esto no debería importarme después de él ya que no creo que pueda confiar en otro chico de nuevo y todo por su culpa aunque yo también tengo un poco de culpa por ser tan ingenua y ciega con él y eso que ya han pasado dos años de todo aquello y yo sigo aquí sufriendo cada noche intentando que mi padre no se entere, no aún, o quizás nunca. No podría soportar ver esa decepción en sus ojos y menos aún revivir todo aquello después de tanto tiempo intentando olvidarlo. Aunque lo quise, joder que si lo quise, más que a mi propia vida y ahora él ni se acuerda de mí, pero tampoco quiero que lo haga y aunque lo hiciera por lo menos ahora no me puede encontrar.

Alone tonightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora