¿Mejores amigas? (MICHAENG G!P)

capítulo tres

Narrador.

-No seas terca.— gritó Mina.

Realmente cuidar a Chaeyoung era todo un reto, se volvía la chica más insoportable del mundo.

-Yo puedo sola.— se quejó la coreana, Mina había estado intentando quitarle las prendas para ayudarla a darse un baño, pero Chaeyoung no lo permite a pesar de que se está muriendo.

-Juro que no miraré.— añadió Mina un tanto enrojecida por lo que salió de sus labios.— Además, ya he visto.

-Lo haré sola Mina, puedes esperar aquí si quieres.— a pesar de lo débil que estaba, logró ponerse de pie y caminar lentamente hacia el baño. No tenía fuerzas, pero aún así su orgullo le impide aceptar la ayuda de su mejor amiga.

A Mina no le quedó otra opción que sentarse en el borde de la cama y esperar. Además, eso le daba tiempo a encontrar la manera de decirle a su mejor amiga que regresó con Kim Seokjin.

Todo fue instantáneo y ni siquiera lo pensó al decirle que le daba otra oportunidad. Aún estaba acostumbrada él y lastimosamente no se ve con nadie más en el futuro.

De cierta manera, se sentía estúpida por siempre caer en lo mismo.

Navegaba en su celular mientras esperaba a la menor, en instagram recibía toda clase de halagos, la japonesa es considerada una mujer extremadamente bella, tenía un físico impresionante y cualquier chico moriría por una simple cita con la japonesa.

En sus DMs, recibía muchos mensajes, no podía abrir ninguno, no si su corazón le pertenecía a Jin. Aunque de igual forma, conocía a todos esos chicos y en la universidad jamás se le acercaban, por ende no les presta atención.

-Hace mucho frío.— se quejó Chaeyoung saliendo en una bata y con el cabello húmedo. Sus mejillas rojas la hacían ver demasiado indefensa.— Siento que me muero.— dijo acostándose en el sofá que había en su habitación.

-¿Algo te hizo mal?— la menor asintió, pero no quería responder, si la japonesa se entera que fue por emborracharse con distintas bebidas y mezclas raras de sus amigos, recibiría burlas por tener un sistema bastante vulnerable.

-Necesito un abrazo.— abrió sus brazos en busca de la japonesa, quien se acercó y le cumplió el deseo, aunque tuvo que acostarse encima de ella para lograrlo.

-Olvidaba que te ponías sensible cuando te enfermas.— añadió la japonesa, Chaeyoung se aferró más y aunque su respiración esté calmada, el cosquilleo en su estómago no.— ¿Quieres ir a un hospital?

Mina se acomodó correctamente cuando sintió las manos de la menor rodear su cintura, desde que se conocen, es común que pasen todo el día abrazadas si una de las dos estaba enferma.

En especial Chaeyoung, se comportaba como una niña berrinchuda cuando enfermaba.

De alguna manera, lo que sucedió entre ambas ya había dejado de ser incómodo desde que entró a la habitación para cuidarla.