CAPÍTULO 2

345 32 4
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Trece Años Después

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Trece Años Después

Un sonido fuerte retumbaba la habitación lo que con molestia se mueve de un lado hacia el otro en la cama. Soltaba un par de gruñidos intentando identificar qué era que sonido ruidoso. Sus ojos pesados se comenzaban a abrir poco a poco quedando despierta mientras que miraba a su alrededor y encontrarse a su lado derecho el teléfono celular; que sonaba fuertemente por la alarma que ella había puesto en la noche anterior para levantarse como solía tener de rutina.

En eso, toma su teléfono y toca la pantalla donde decía detener. Así que con cansancio vuelve a acostarse. Unos segúndos más tarde se mueve entre quejidos y dándose un estirón queda sentada en la cama, y cuando su cuerpo ya estaba relajado miró nuevamente a su alrededor con más claridad.

La habitación estaba oscura a causa de las cortinas que tapaban la ventana que eran transparentes, no se veía destello de luz alguno ya que estas tapaban por completo la claridad.

Así que, miró a su otro lado y observó al hombre que amaba con toda su vida plácidamente dormido, lo que con una leve sonrisa recuerda lo pesado que era al dormir y al recordar aquel detalle de él; su corazón se estremece, pero, otro lado se entristece.

Estuvo varios segundos observándolo. Veía como la cabellera de Elías estaba alborotada dándole un toque rebelde, su mano posaba en su cara y sus labios fruncidos dando a entender que estaba profundamente dormido.

Zoe con cuidado se mueve acomodándose en la cama mientras que miraba a su lado volviendo a sentir pesadez en su pecho tal y como lo estaba sintiendo en todas sus mañanas desde que todo en su vida cambió drásticamente.

Suspira hondo y algo pensativa comienza a hacer lo que ya por costumbre hacía; orar.

Aún con todo lo que tenía en mente recuerdos de como su vida era antes con Elías le causaban un gran dolor en su corazón y mientras pasaba el tiempo intentaba con todas las fuerzas por luchar por ese amor. Por el amor de su juventud. No quería perderlo por la que al pensar en esto su corazón se apretaba más y más a causa de las inseguridades que tenía como mujer; que a pesar de entender que ella tenía valor, quería que él lo recordara también.

Luchando por tu Amor | Novela Cristiana | ACTUALIZANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora