Please, don't go [One Shot]

Please, don't go

Abrió sus ojos al escuchar el sonar de una pequeña campana.

Observó desconcertado el lugar en el que se encontraba, lo reconoció de inmediato, era el mismo sitio donde había peleado contra AFO al lado de los demás héroes.

Intentó incorporarse pero una mano lo detuvo. Fue entonces que se percató del lugar donde estaba recostado.

—Por favor no te levantes — habló Izuku mientras empujaba el pecho del chico con suavidad.

Katsuki estaba recostado en el suelo, su cabeza estaba apoyada en las piernas del pecoso.

—¿Qué sucedió? — preguntó desconcertado.

—Ya todo acabó — contestó con una dulce sonrisa en sus labios.

Katsuki observó al pecoso, Izuku lucía tranquilo, su traje de héroe parecía impecable sin un sólo rastro de polvo, eso lo desconcertó aún más. Alzó su mano derecha con la intención de tocar su propio rostro, pues recordó haber sido herido en batalla, aunque la sorpresa lo golpeó al notar a su brazo y rostro intactos.

—¿Qué demo... —

—Todo acabó — repitió el pecoso —Todo se resolvió y tus heridas fueron tratadas — explicó con tranquilidad —Ya puedes descansar —

Katsuki sabía que las palabras de Izuku eran para tranquilizarlo, peor algo dentro de él no se sentía bien, algo no estaba bien.

Sus ojos volvieron a cerrarse y cuando volvió a abrirlos se observó a sí mismo frente a un espejo.

—Pero ¿Qué... — habló desconcertado.

Observó su entorno, estaba dentro de un baño, recargado en el lavamanos mientras observaba su reflejo. Se observó a sí mismo, percatandose de que la única prenda que cubría su cuerpo era un boxer de color negro.

—¿Dónde está mi ropa? — preguntó mientras buscaba cualquier prenda para cubrir su casi desnudes.

Buscó sin obtener éxito, frustrado decidió salir del pequeño cuarto, caminó hacia la puerta y al abrirla volvió a quedar desconcertado.

Paseó sus ojos por toda la habitación, pero no la reconoció, no tenía idea de dónde se encontraba. Sus ojos se abrieron por la impresión al notar un bulto debajo de las sábanas de la cama.

Había alguien más ahí.

¿Qué rayos estaba pasando?

El sonido de un quejido lo sacó de sus pensamientos, observó estático como la persona bajo las sábanas comenzaba a moverse y pronto una mata de desordenado cabello verde se asomó.

Observó con asombro como el pecoso salía de entre las sábanas mientras estiraba sus brazos.

Izuku frotó sus ojos con sus manos y al finalizar sus acciones observó al rubio frente de él.

—Buen día, amor — dijo con una amplia sonrisa en sus labios.

Katsuki observaba a su amigo de la infancia sin poder articular palabra alguna, Izuku estaba frente a él, las sábanas cubrían la parte inferior de su cuerpo, la parte superior de su cuerpo se encontraba desnuda.

Frunció levemente el ceño, no entendía nada.

—¿Sucede algo, cariño? — preguntó el pecoso con preocupación —Luces muy callado — obvió.

—No... Es decir — mordió su labio inferior, algo no estaba bien, podía sentirlo.

Izuku rió levemente —Debes estar cansado, mi amor — dijo con una amplia sonrisa en sus labios —El día de ayer fue maravilloso y  la noche fue increíble — dijo con su rostro tornándose rojo —Pero estoy feliz — dijo mientras alzaba su mano izquierda y contemplaba el anillo que se encontraba en su dedo anular —Por fin estamos casados — dijo con una adorable expresión y mirada soñadora.