ADVERTENCIA: este contenido lo hago por el momento, lo cree para que leyeran algo mientras sigo con la historia de Waka x Shinichiro. Cosa que cree en otra cuenta porque había perdido ls contra señal (lo eliminé porque ya recuperé esta) y ya... Aquí les dejo esta historia por el momento <3
› No es canon.
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La noche..
Mikey estaba aburrido de que Takemichi ni siquiera lo mirara. Él era más de divertirse, le gustaba ver el dolor de los demás ya que le prendía, amaba pasarla bien y encantaba estar bajos drogas mientras lo hacía.. Pero claro, era imposible si Takemichi no era capaz ni de tocarlo.
Despertó de aquel transe en el que estaba porque sintió un llanto de parte del llamado "héroe llorón". — ¿huh? ¿Que pasa? — fueron las primeras y las únicas palabras que salieron de su boca.
— ¡Mikey-kun! — fue la respuesta que obtuvo, algo que ya se esperaba para ser franco, nada nuevo. — Estaba preocupado, parecía como si... Te hubieses tomado unas pastillas de Sanzu. — insinuó al no escuchar respuestas del oji-negro.
— ¿Sanzu?.. No seas idiota, no tomo pastillas tan fuertes... — suspiro y sonrió. Puso su mano en el cabello de Takemichi y lo desordenó. — Takemicchi, hoy saldré. — declaró el rubio mirándole directamente a los ojos.
— ¿uh? ¡Genial, Mikey-kun! Es agradable oír eso después de tanto tiempo ¿Quieres que te deje algunos Dorayakis cuando vuelvas por la noche? —
— Micchi, no vendré hasta mañana... Quiero disfrutar.. —
— ¡No hay problema! Me llamas cuando llegues y estés listo y te traigo Dorayakis, ve y baila mejor que todos en la fiesta, amor. —
Por un momento Mikey se arrepintió de lo que iba a hacer pero su estrés sexual le estaba ganando en su momento. — Gracias, Micchi. — le sonrió cálidamente y le dio un abrazo.
𔘓
/llamando.../
– ¿Hmm? Espero que sea importante, no quiero perder mi tiem-.
— Sanzu, cierra el pico. —
– ¡¿Mi rey!? ¡¡PERDÓN!!–
— Sólo cállate y escúchame atentamente. —
– ¿Para qué me llamas, dulzura? –
— Quiero verte. Ve al hotel de antes lo más rápido que puedas, yo estaré en camino ahora y espero verte ahí. —
– Uuh~ entonces estaré ahora ya, nos vemos, mi rey. –
/click./
( Takemicchi... Lo siento mucho por esto) fue su único pensamiento en todo el momento que estaba en camino a dicho hotel.
𔘓
— Vaya.. Mi rey.~ —
— Haruchiyo, quiero algo de ti. —
— ¿De mí? —
— Quiero que me folles tan duro como te follas a esas putas baratas a las que les pagas. Que me golpees tan fuerte como golpeas a los Haitani cuando lo hacen contigo y que me partas en dos sin queja alguna. —
— Mi rey.... Yo no podría hacer eso... —
— Haruchiyo, por poco y no te pajeas en frente de bonten por tener pensamientos de mi. ¿Creés que no me doy cuenta de cuánto me deseas? Tu rey te necesita ahora mismo, no piensas en fallarle... ¿O si? —
