Psicología del corazón

Infelicidad

Buenos días, tardes o noches dependiendo de cuando lo lean, hoy les traigo una nueva historia, así que espero que le sea de su agrado, si lo sé, raramente se me dió la gana de escribir muy rápido no? Que raro, la última vez me demoré 2 meses... Perdón

Ya dejando eso atrás, pues no me queda nada más que decir que comencemos...

La felicidad... aquel sentimiento que supuestamente siempre era nuestro anhelo humano, esa búsqueda incesante cual nos prometió la vida, al final para que seguir con esa ilusión? Tal vez para algunos si son esos "elegidos" de poseer eso o los que pueden seguir creyendo en ese cuento que nos contó papá, mamá y todos los demás, como un dogma, una regla de hechos que nunca se deben quebrar, el amor y la felicidad, va, tonterías, la sociedad siempre te tirará un balde de agua fría, y te apaga todas tus ilusiones, la realidad siempre queda perenne mientras tu tiempo solo se desgasta lenta y silenciosamente

Ash: Ese soy yo... Ash Ketchum, de pueblo Paleta... psicólogo de profesión y padre soltero...

???: Papi po qué hablas con el espejo? -se escuchó la voz de una niña cercanamente-

El hombre se dio la vuelta, y ahí estaba ella, una niña pequeña, tenía una "Z" en sus mejillas y una sonrisa ancha, una carita que le derrite el corazón al ser más serio del mundo, menos a el claramente, y a diferencia de su padre, la niña tiene ojos azules y un cabello marrón algo oscuro, los vagos recuerdos que posee su progenitor de aquella mujer que amó solo le hacen ver que era idéntica a su... madre... lamentablemente...

Ash: Nada Lara, papi solo está... conversando... con... señor espejo ok? No te preocupes por papá ok? Más bien, ya me tengo que ir a trabajar cariño, quieres panqueques para desayunar? Que dices? -dijo simulando todo-

Lara: Ya comí, pero igual haz, mi pancita aún tiene hambre, y la abuelita Delia va a venir? -dijo inocentemente-

Ash: Claro que si hija mía, ve a ver tele, seguramente comienza ya tu programa favorito... Y... donde rayos está mi corbata?

Lara: Ok papi, y tu corbata ta en el refrigerador -dijo corriendo dirigiéndose a la cocina-

Ash: Pero como... -dijo saliendo de su habitación para dirigirse a la cocina-

Al llegar encontró como toda la cocina estaba desordenada... otra vez... Lara siempre deja desordenado todo cada vez que trata de hacerse el desayuno

Ash fue a la cocina, y efectivamente, la corbata se encontraba en el congelador, el juraba haberlo dejado en... cierto...  él ayer tomó demasiado que hasta ni se acordaba como regresar a casa

Ash: Oye Lara quieres tus panqueques con miel o con mantequilla? -dijo poniéndose la corbata y siguientemente, sacar todas las cosas para preparar el desayuno-

Lara: Eh... con... helado! -dijo feliz sin despegar su mirada de la televisión cual sonaba a todo volumen-

Ash: Lara, tu bien sabes que es invierno, y... podrías bajarle el volumen por favor? -dijo sin ganas preparando todo-

Lara: Perdón papi -dijo bajándole exponencialmente el volumen del aparato-

Ash: A sí que miras comedia eh? Y de que trata esa serie? Para ver si puedes ya verla a tu edad? Aún eres niña eh? Que no se te olvide

Lara: Eh... Es una serie de una familia disfuncional -dijo desde la sala-

Ash: Una familia disfuncional... Ah, la del "Horrible Oye" Bueno, eso no es para tu edad Lara, por favor cambia de canal...

Lara: Claro papi -dijo cambiando el canal a uno más infantil-

Dejó a Lara viendo su programa y preparó el desayuno, el primero era para el, y el segundo para ella, al terminar de preparar todo le dio su comida a Lara, casi en un abrir se terminó de comer todo, ni dejó una miga, a Ash le llegó los recuerdos de su yo pequeño, de pronto, no se si será por haber madurado o un desequilibrio alimenticio pero ahora a diferencia de antes el ya ni podía comer en esas cantidades