ᴍᴀᴜʏʀɪᴄᴋʏ ¿ᴛᴇ ᴀᴄᴜᴇʀᴅᴀꜱ ᴅᴇ ᴍí? (ʀɪᴄᴋʏ ᴍᴏɴᴛᴀɴᴇʀ)🎧

39 - El día libre -

Yo me desperté tarde y vi a Ricky arreglándose el cabello en el servicio con la puerta abierta.

- Amor, te amo - susurré yo riendo un poco. Aún estaba en la cama tumbada solo que despierta.

- Si, pero vos seguí durmiendo. - Me contestó mirándome de reojo por el espejo y yo sonreí y me hice morritos.

- No, vístase y vayamos a tomar un café. - Le dije yo con ganas de hablar con él.

Él se encogió de hombros y me respondió con un “sí” algo seco, como si le pasara algo.

- Venga - Le pase un par de prendas de ropa y se vistió cerrando la puerta, yo hice lo mismo minutos después.

- ¿Desayunaste bebé? - Le pregunté tocándole el hombro cuando ya nos habíamos cambiado los dos.

- No - Me negó y dejó un besito muy diferente a lo normal en la cobertura de mis labios.

- Bueno vamos! - Dije yo caminando y tendiéndole mi mano para que la cogiera.

- Esperá! - Me dijo Ricky, él se despeinaba el cabello de manera perfecta mientras yo lo miré extraña.

- Necesito que hablemos hermosa - Añadió él tras un silencio.

- Me lo contás allí boludoooo!! - Le insistí yo para que saliéramos por la puerta.

- Me voy mañana de gira y tardaré un mes. - Cuando oí eso me rompí a pedazos, Ricky estaba ahí parado frente a mí con una cara de preocupación.

- Yo iré ¿no?, por trabajo ¿verdad? - Pregunté con los ojos llorosos. Al ver que no respondió me acerqué a él - decí algo!! - Alcé un poco la voz y él me miró nervioso.

- Vos no venís, lo siento amor, hablaremos ¿si?, No llores - Él se acercó más a mí y me abrazó para que no llorará pero era imposible, cuando sentí sus brazos pegados a mí me dieron tranquilidad. Y justo en ese instante levanté la mirada hacia Ricky y lo bese.

- Mau y vos ¿los dos se van? - Quise saber y él afirmó con la cabeza.

- Ok, tenemos que llevar esto bien, somos el mejor team... se que esto es difícil amor, pero vos solo gozalá! ¿Ok? - Dije yo, mi voz temblaba y aún seguía llorando, las lágrimas no paraban de salir y salir y no podía pararlas.

- sí, ¿por qué seguís llorando? - Él me volvió a abrazar cálidamente y apoyo su cabeza en la mía. Yo no supe que responder.

- ya me hiciste llorar!! - Ricky me miró riéndose y se secó las lágrimas. Mientras yo me logré calmar un poco.

- Te me vas cuando menos lo esperaba ¿porque tardaste tanto en decirme? - Pregunté yo algo enfadada está vez y separándome de su abrazo.

- Porque... estaba nervioso - Me confesó y intentó besarme pero yo le rechacé el beso.

- ¿hace cuánto eso está en pie? - Formulé una nueva pregunta y él me miró y respondió. - Pues... Unos días - Me contestó - ¿¡Unos o bastantes?! - Me alteré yo.

- Lo siento... No sabía - Los ojos de Ricky comenzaron a brillar mucho y empezó a sollozar mientras lloraba.

- Perdona amor... No quería presionarte - Me disculpé al verlo tan estresado y viendo sus manos temblar un poco.

- Vení aquí mi niño - Abrí los brazos y Ricky se dejó abrazar secándose las lágrimas.

- Vayamos al café ¿si? - Dije yo después de unos minutos abrazándole y cogiendo su mano con una sonrisa, dirigiéndome a la puerta ya que ya estábamos listos para un desayuno de amor.