⛓️QUE NO NOS ESCUCHEN⛓️

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Joana narra:

Hola, soy una empresaria, tengo una vida "perfecta" si así se puede decir, tengo una familia, una esposa muy hermosa llamada Cris yo tengo 37 y Cris tiene 25, tenemos tres bebés, bueno ya no tan bebés el más grande se llama angel tiene 11 años, el penúltimo se llama Sebastián tiene 3 años y la última, nuestra princesa de la casa Ana, tiene 1 año apenas, he sido la mujer más feliz de mi vida con ellos, ahora estoy de camino a casa, llevo regalos para mí hijos, juguetes ya que a ellos les gusta bastante los juguetes, para mí esposa le llevo su delicioso pastel de chocolate que tanto le gusta, al fin llegué a casa, al abrir la puerta me encuentro con la presencia de mis hijos en excepción de Ana ya que de seguro la están amamantando.

Ángel: te extrañe mucho.

Mientras me abrazaba yo también los abrace y se fueron a jugar con los regalos que les dí, me dirigí a la habitación de Ana y como era de esperarse ahí se encontraba mi mujer con mi princesa, eran mis dos princesas.

Joana: hola mi amor

Dejando un suave beso en los labios.

Joana: ¿Ya está dormida?
Cris: si, acaba de dormir.
Joana: mira te traje tu pastel de chocolate.
Cris: muchas gracias mi amor, eres tan atenta.

Dejándolo en la mesita de su hija.

Cris: ¿Pero sabes que se me antoja ahora?
Con una mirada seductora y mordiendoce los labios.
Yo sabía lo que quería pwro me gustaba jugar.

Joana: ¿Que desea mi princesa?
Cris: ammm... Tengo antojos de una rica, espesa y caliente leche papi.
Joana: ¿Antojos? ¿No será que estás embarazada?
Cris: tal vez, ¿Si me vas a dar ese antojo?
Joana: no puedo, nuestros hijos están en la habitación de a lado y Ana está enfrente de nosotras.
Cris: anda, no se darán cuenta si no hacemos ruido.

Dijo tomándome el pene por sobre el pantalón, me empezó a masturbar de una manera desquiseada, me desabrochó el pantalón y me lo bajo juntó al boxer dejando en visto mi gran pene juntó a su erección.

Cris: se ve tan apetitoso.
Dijo relamiéndose los labios.

Ella se estampó contra mis bolas hundiendo su rostro en ellas, tenían tanta leche.

No podía gemir, sentía que me moría al no poder sacar el placer que mi mujer me daba, en la habitación solo es escuchaba el chapoteadero que mi esposa chupaba, solo hacia mi cabeza hacia atrás mientras mi esposa estaba sentada en la cama con mi hija a lado chupándola, me pasaba la lengua  cuidadosamente pero hambrienta al mismo tiempo, la cabeza de mi pene sentia que explotaba de placer, mi esposa tenía una mano en mis piernas fuertes y la otra masturbaba después de sacar mi miembro de su boca.

Joana: mierda.

Susurré.

La tome de las manos para que se quedara de espaldas, sus manos se colocaron en la colcha y la otra parte estaba de pie, mi hija al parecer seguía durmiendo, desabroché su sostén y los acaricie son verlos, con las llemas de mis dedos sobaba la puntita y los jalaba rudamente para que ella soltará  pequeños gemidos que los tenía que ahogar para que no se escucharán.

Joana: espera, me voy a poner un condón, no quiero a otro joanito.

Saque el condón de mi bolsa y lo coloqué en mi pene, ahora sí.

Coloque la punta de mi grande pene en su entrada vaginal, tenía que ser cuidadosa porque aunque ya tuviéramos varios hijos aún le dolía en las primeras penetradas, su intimidad ya estaba bastante mojada y eso me volvía loca, metí la punta y ella se retorcío frenéticamente, colocó su mano en mi abdomen como advirtiéndome que fuera despacio.

Cris: despacio Joana.

Metí otros 3 centímetros más y ella nuevamente se retorcío e hizo su cabeza hacia atrás como queriéndome decir que aún le dolía, me quede así, sin moverme, y nuevamente metí más de mi gran pene, sentía como su vagina se habría por y para mí, aún estaba apretada, aún me encantaba metersela como la primera vez, metí más y ella solo se quejaba, ella quería esto así que tenía que soportarlo.

Cris: más despacio.

Intento susurrar.

Hasta que sentí que mis bolas golpearon sus piernas, me di cuenta que toda mi verga ya estaba adentro, me incliné para darle besos en la espalda pero al parecer la lastime porque grito fuertemente, a mi ahora mismo ya no me preocupaban los niños, ahora me importaba terminar, salí de ella para nuevamente estocar fuertemente, haciendo sonidos demaciados ruidosos.

Joana: jodeer~

Daba fuertes nalgas, me meneaba hacia atrás, adelante, circularmente o aveces me detenía para observar como sus ojos estaban llenos de lágrimas por lo doloroso que era para ella, a mí me gustaba, me causaba satisfacción y excitación verla así, ver su ano me daba tanto placer ver eso, solamente quería más y más, sentía ese rico escalofrío, esa satisfacción del presemen, esas bolas chocando más con sus piernas y haciendo aún más ruido, esos quejidos de ella y mi verga metiendo y saliendo de ella era obvio que estaba a punto de venirme cuándo se abrió la puerta de una.

Sebastián: ¿Mamá Joana? ¿Que están haciendo?

Dijo con curiosidad.

Yo intentaba subirme el pantalón pero mi erección era imposible así que me senté y me coloque el cojín de mi hija en la entre pierna, Cris se bajó rápidamente el vestido y se abrochó lo más rápido el sostén.

Sebastián: ¿Mamá por que lloras?
Cris: no pasa nada mi amor, vamos a jugar.
Sebastián: ¿Y por qué no puedes caminar bien?
Joana: Por se callo por accidente Sebas.
Sebastián: ¿Y por qué mamá Joana estaba desnuda si todavía no es hora de bañarnos?
Joana; ammmm... Por qué...
Mira Sebastián mejor ve a jugar anda anda...

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⏰ Última actualización: Aug 14, 2022 ⏰

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