Era un día normal tanto para nuestro joven protagonista y aquel moreno peliblanco, se encontraban desayunando en una cafetería, no tan lejos del hotel, todo esto debido a que cierta persona quería cambiar de ambientes.
—¿No hubiera sido mejor quedarnos en el hotel?—preguntó el peliblanco mientras observaba a su compañero mezclar su bebida.
—No tienes porqué preocuparte, Noé, un cambio de ambientes no nos hará daño. Además...—miró unos segundos al contrario para luego terminar de hablar— Tengo unos asuntos que tratar por aquí.
—¿Se trata de una persona que padece de la maldición?
—No—dijo a la par que se llevaba un trozo de pastel a la boca— Tsk, muy dulce.
Noé no entendía. ¿Se trataba nuevamente de algo relacionado con Moreau? No, si era eso Vanitas ya se lo habría mencionado antes.
Luego pensó en Mikhail, aquel niño que supuestamente era su hermano, era probable que aún intente convencerlo para resucitar a su "padre".
Ese pequeño pensamiento logró hacer que Noé se preocupara ligeramente. Vanitas notó eso y dejó su pastel de lado para así prestarle atención a su compañero.—No tienes porqué preocuparte, lo digo en serio Noé. No tiene nada que ver con todo lo que hemos estado tratando estos días. -dijo aún mirándolo—se trata de Jeanne.
Noé lo miró boquiabierto, aún más desconcertado que antes, esta vez Vanitas lo ignoró para así poder beber tranquilamente su café.
El chico decidió no preguntar más, sabía que Vanitas evitaría responder a sus preguntas así que se las guardó para otro momento. Si los asuntos que tenía pendientes tenían que ver con Jeanne, dedujo que no era algo tan grave.Minutos después Vanitas se levantó de su asiento mientras se arreglaba un poco la vestimenta. Noé lo miró unos segundos para después levantarse también.
—¿Ya nos vamos?
—No, yo me voy, tú haz lo que quieras. Después de todo no te pedí que vinieras—dijo Vanitas a la par que se retiraba del lugar.
El moreno observó a su compañero irse hasta que su figura desapareciera, estaba medianamente enojado con él, ya que Vanitas sabía que este querría acompañarlo.
(...)
Nuestro protagonista vagaba por las calles de la ciudad, sin un destino aparente, parecía que quería estar solo y nada más. No se sentía muy bien, estaba confundido. No le mintió a Noé con que los asuntos que debía de atender tenían que ver con Jeanne, pero aunque quisiera encararla y ponerle fin a todo lo que estaba ocurriéndole, no podía. Su rostro se tornaba de color rojo, su respiración se agitaba y le costaba articular bien las palabras al estar cerca de ella.
¿Cómo pasó de estar coqueteándole tan tranquilamente a no poder ni siquiera mirarla a los ojos?Vanitas detuvo su paso al llegar a un puente, en el que decidió quedarse por unos minutos, contemplando la vista. Reposó sus brazos en las barandillas de este, no le prestó atención a otra cosa más que a la preciosa vista.
Fue entonces cuando una persona se le acercó y tocó su hombro, haciendo que el chico se girara repentinamente y encontrándose así con unos ojos amarillos como los pétalos de un girasol.—J-Jeanne...—al pronunciar el nombre de la contraria, este sintió un leve ardor en sus mejillas— ¿Qué haces por aquí?
El pelinegro quería contarle todo lo que le había estado ocurriendo desde hace tiempo, pero no pudo hacerlo por obvias razones (nerviosismo).
—Vanitas—dijo la chica mientras lo miraba a los ojos estando ligeramente ruborizada—El amo Luca quiso venir a dar una vuelta por aquí, vine para acompañarlo.
—Oh, e-entonces sería mejor que me retire, dudo que el enano quiera verme cerca tuyo.
Antes siquiera de que Jeanne pueda decir algo, Vanitas ya se estaba alejando del lugar lo más rápido que podía.
Juju.
Mi primer "fanfic" gente, ojalá les guste.
He visto que no hay mucho contenido sobre esta bella pareja, por lo tanto quise escribir algo sobre ambos.
Perdón si es demasiado corto, el próximo capítulo (si es que esto recibe apoyo) será mucho más largo, lo prometo! <'3¡Cualquier sugerencia es bienvenida! :D
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Indigno De Tu Amor
RomanceJeanne finalmente aceptó sentir algo por Vanitas, sin embargo, él aún no puede procesarlo. -"¿Cómo podría alguien amarme?..." ¿Cómo se desarrollará esta pareja? ¿Vanitas podrá admitir que también siente algo por la peliblanca? Veamos qué ocurre...