CAP 1

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Hoy era un dia normal para mi, como siempre, tenia que servir a la familia Miller, oh, por cierto, soy Damian Smith, mejor conocido como el asesino más temido de esta ciudad  “lobo”, Damian “Lobo” Smith, ese soy yo, como les contaba, sirvo para la familia Miller, el señor Max Miller, es el dueño de una empresa muy grande de la ciudad, pero al igual es un narcotraficante, el mas buscado de la ciudad, si es por asi decirlo, su mafia se basa en el trafico de armas, al igual que la venta de droga, y es demasiado conocida por sus multiples asesinatos, en verdad dan miedo, su mafia es nombrada como “ Cartel MM” o tambien como el “Cartel doble M”, esta semana tenemos que salir de viaje, ya que estariamos yendo a visitar viejos amigos que nunca pagaron su prestamo y huyeron de el pais, asi que ahora estoy aqui arreglando mis pequeños juguetes, con los cuales me divertiria un rato, termino todo eso y me dirijo hacia la casa de los Miller, ahi me recibe su ayudante de limpieza, la cual con amabilidad saludo y ella me deja pasar, con una sonrisa en su cara, espero a que el señor y señora Miller bajen, ya que solo irian ellos y algunos empresarios mas, amigos de ellos y tambien socios, veo que bajan con esas mascaras suyas, son tan dificiles de olvidar, el señor M me saluda con una sonrisa.

S/M: Damian! ¿Estas listo pequeño?

D: Claro que si señor, necesito obtener un poco de diversion /dejo notar una sonrisa impregnada en mi cara.

S/M: Creeme que la tendras cachorro. /me sonrie.

Saludo a la señora M, la cual quiero como una madre para mi, ella me ha enseñado cosas que me han convertido en esto, ella me regalo mi primera navaja, con la cual mate a mi primera victima, tenia 15 añoa, Ja, loco, ¿cierto?.

Dejemos eso atras, fuimos en carro de los Millers, en camino a el aeropuerto privado de ellos, en verdad eran muy ricos, ¿como no serlo?, eran el cartel mas conocido y con mejor economia, el caso, nos adentramos al avion, en el cual viajamos unas cuantas hasta llegar a México, ese seria el primer lugar en donde nuestro amigo, llamado Ricardo Garcia, pagaria su pequeño prestamo, llegamos a su pequeño rancho, donde nuestros amigos de nuestro cartel, ya habian llegado antes que nosotros, para facilitarnos el trabajo, mirar esos cuerpos tirados y ensangrentados era como estar en casa, sonrei al instante mientras que al igual sentia esa necesidad de matar, acomodaba mi traje de gala color negro, normalmente lo utilizo para este tipos de actos, entramos y en la sala ya estaba el señor Ricardo atado y con la boca tapada, tan debil… me encanta, al mirarme se sorprendio, supongo que le gusto, o no lo se, tal vez mi traje trae algo de sangre, maldita sea, no lo limpie bien, como sea, el señor miller se acerca y lo mira.

S/M: Oh pequeño amigo, llego tu dia, no pagaste como prometiste, lo siento tanto…me tendras que pagar con esto. 

Dijo para despues regresar hacia mi, y con voz firme y fuerte dice

S/M: Necesito el corazon, cachorro…

Asiento y en ese momento con la mirada, lo mire, el señor Ricardo ya estaba debil, habia escuchado las ordenes de mi jefe y sabia lo que le esperaba, nada lindo, tampoco tierno.

Pedi que lo acostaran y lo amarraran, lo hicieron y despues puse mi malentin llena de armas en el sillon, tome mi pequeña navaja, como la amaba, aun tenia sangre de mi anterior victima, la puse sobre la piel de el hombre, dando ligeras caricias, haciendo que el sintiera su filo, comence a darles y cortar varios lados de su cuerpo, posicione una en su hombro, otra en su abdomen un poco mas profunda, escuchando sus jadeos de dolor, despues la puse entre sus pechos, para comenzar a cortar lentamente, escuchado sus gritos de dolor, senti como mi navaja llego a los huesos, saque mi navaja y abri su cuerpo, y sacando sus huesos, despues de romperlos, aun escuchando sus gritos y suspiros.

R: HIJO DE PUTA! SUELTAME!!! AH!!!!

Verdaderamente a Damian no le gustaba que le gritaran y mucho menos que lo insultaran, asi que se enfurecio, lo cual hizo que antes de sacar su corazon, bajo sus pantalones y boxer, dejandolo al aire libre, tomo su pene y comenzo a darle ligeros cortes, dejandolo sangrando, despues tomo sus testiculos y lo miro.

D: El hijo de puta eres tu, por no pagar, ahora ya no necesitas esto, nunca los tuviste hijo de puta

Comenzo a cortarlos, escuchando de nuevo esos gritos, pero ahora eran aun mas desgarradores, la sangre no tardo en escurrir por sus manos, termino de cortarlos y los tiro a un lado de la sala, despues, de un solo jalon, quito su corazon el cual aun latia, lastima, el estaba repleto de sangre, su cara y su traje aun mas. 

Fue hacia el señor M, se inco y con una reverencia le entrego el corazon de el hombre

D: Aqui tiene Jefe, sus deseos son ordenes.

El señor tomo el corazon y sonrio, le dio las felicidades a Damian, ya que habia hecho un buen trabajo. La señora M lo abrazo, no le importaba la sangre, el era como su hijo y siempre lo apoyaria, eso haria una madre, ¿cierto?.  

DULCE VENGANZA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora