PROLOGO

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CARLA

7:49 am, cojo el tren. Me dirijo  hacia Barcelona, ​​una ciudad de España. Era una hora de viaje, así que me senté y me puse a pensar en mis cosas. Volví a la realidad cuando escuche el sonido de las puertas abriéndose.

Al llegar al departamento en el que iba a estar un año, lo primero que hice fue tumbarme en el sofá. Estaba agotada. Después de estar un rato en el sofá haciendo el vago, decidió que era hora de desempacar las maletas. Habían dos habitaciones. Al entrar a la primera habían dos maletas, por lo cual supuse que la chica que sería mi compañera ya había llegado. Las dos eran muy parecidas, así que no me importó que ella hubiera elegido antes.

Empecé a guardar toda la ropa en el armario. Justo cuando iba a poner los zapatos escuche la puerta abriéndose. Fui a mirar quien era, aunque estaba claro que sería mi nueva compañera de piso.

-Hola, soy Chloe, espero que no te importe que haya elegido la habitación primero. Como las dos eran muy parecidas pensé que no te importaría, pero si no te gusta podemos cambiarlas.

-No te preocupes, yo soy Carla, encantada.

-Se que es muy rápido, y que nos acabamos de conocer, pero hoy hay una feria aquí, ¿te apetece venir conmigo? Quizás vienen unos amigos. -Dijo con una sonrisa.

-Claro, pero como es que ya tienes amigos ya, ¿no has llegado hoy? -Si que era verdad que no era la mejor haciendo amistades, pero me sorprendió.

-No los he hecho hoy, son amigos de siempre, solo que son dos años mayores, por eso ellos estaban ya aquí.

Una hora más tarde nos encontrábamos arreglándonos para ir a la feria. Quien diría que yo, Carla Bélanger habría socializado tan pronto. Mi hermana estaría orgullosa, siempre se ha reído de mi porque me costaba relacionarme. Me hubiera encantado ver su cara ahora mismo.

-Nos vendrán a recoger en moto, ¿no te importa no? Íbamos a ir en coche, pero seguro que sería más difícil encontrar un sitio para aparcar.

-Nunca he ido en moto.

-Que guay, la primera vez que te habrás montado en moto será con nosotros -Dijo más emocionada.

Acababan de tocar al timbre. Yo me estaba retocando el rímel, así que fue Chloe a abrir. Una vez acabé fui hacia la puerta. Eran dos chicos, uno rubio de ojos marrones, y otro moreno de ojos claros.

-Hola, ¿tú debes de ser Carla no? Yo soy Erik, encantado.

-Holaa, soy Carla.

Note como el otro chico, cuyo nombre no sabía aún me daba un repaso. Aparte la mirada rápido, para que el no notara que lo había visto.

-El es Axel. -Dijo Erik, al ver que el no se presentaba.

-Bueno, ¿nos vamos ya? -Dijo impaciente Chloe.

Al bajar del piso vi que habían dos motos aparcadas en frente. Supuse que serían de Erik y Axel. Al ver que Chloe se dirigía hacia la misma moto que Erik me fui con Axel.

-¿Has montado alguna vez? -Pregunto Axel.

-No .

-Vale, entonces déjame que te ayude. Agárrate de mi espalda y ponte el casco.

En cuanto hice lo que me dijo arranco la moto, y detrás le siguió Erik. No hablamos en todo el camino, fue un poco incómodo, pero no muy largo.

Al llegar habían muchísimas luces, y Chloe tenía la misma cara que tenía una niña pequeña al abrir sus regalos de navidad.

-¡Nos tenemos que subir en todo! -Dijo entusiasmada Chloe.

-Yo me apuntooo -Dije chocándole los cinco.

Mentiras ocultasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora