Era un día bastante normal, el sol era igual de caliente que siempre, cumplía su función de iluminar el día, de vez en cuando una nube lo tapaba dando sombra.
Las personas realizaban sus actividades diarias, todo en una completa monotonía, la cual era perfecta, como si el mundo fuera un reloj y las personas parte del engranaje que hace que este de la hora de manera perfecta.
Sentado en el patio de su escuela, en una zona especialmente para cubrir a los alumnos del sol, Izuku Midoriya descansaba antes de empezar sus clases, con sus audífonos puestos se perdió en su teléfono mientras revisa sus redes sociales.
-Hola- Saludo una chica que acababa de llegar con el. -H-hola- Algo nervioso por el contacto de la chica se quitó los audífonos, puso pausa a la música y se movió para que la chica se sentará.
-Tu nombre era Izuku ¿Verdad?-
-Sí-
-Bueno...- Ambos jóvenes se quedaron en silenció y siguieron revisando su celular, de vez en cuando el chico volteaba a ver a la chica intentando hablar con ella.
-Ya es hora de que vayamos al salón- Dijo Izuku tomando su mochila y levantandose. -Sí- Respondió la chica de la misma forma.
Ambos comenzaron a caminar directo a su salón.
Ambos llegaron al salón casi al mismo tiempo que el resto de sus compañeros, y maestro.
Cada uno tomo un lugar diferente, la femenina se sentó junto a sus amigos hasta el fondo del salón y el chico en medio.
(...)
El tiempo siguió pasando, el joven vivía su vida normal, las clases, su familia, todas sus actividades en una completa monotonía.
Entonces un día vio a la chica de pelo celeste, estaba sentada en una de las bancas mientras miraba su celular.
A pesar de estar en el mismo salón, no habían convivido demasiado, sabían su nombre por el pase de lista, pero no había una amistad.
-(Está sola)- Pensó, la miro y noto que era bella, tenía lindos ojos. -(No creo que sea el momento)- Vio su cara y parecía que estaba cansada o enojada, es como si su mirada quisiera hacerte saber que ella es superior.
Camino al otro lado, pensando en lo idiota que sería haberle hablado, pero volteo y la miró. -(Qué más da)- Se acercó a ella y abrió la boca.
-Hadou- La chica lo miro. -Hola- Le respondió. -¿Puedo sentarme?-
-Claro- La chica quito su mochila para el joven se sentará, ambos estaban ahí sentados sin decir ni una sola palabra.
-¿Cuál es tu héroe favorito?- Pregunto el chico.
-Es...-
(...)
-Hola Midoriya- Saludo, ambos jóvenes se encontraron en la entrada. -Hola Hadou- Los dos pasaron sus credenciales e ingresaron a la escuela. -¿Terminaste la tarea de Midnight sensei?- Preguntó la femenina.
-Sí ¿Acaso tu no?- Preguntó. -¡No fue muy difícil!- El chico la miro confundido, la tarea había sido muy sencilla a su parecer. -¡No me mires así!- Hizo un puchero. -Las verdad es que mi gata se acostó en mi cuaderno- El chico la miro algo raro. -¡Se veía muy linda! Demasiada tierna para molestarla ¿Quieres verla? Le tomé fotos- Saco su celular.
