Nadie en casa (One-shot/R18) (Shin Soukoku)

Capítulo único.

Era un dia jueves alrededor de la 7pm, Atsushi se encontraba en su habitación mientras usaba su celular, estaba viendo algunas publicaciones de su ahora compañero de trabajo y considerada familia, Dazai Osamu, un ya adulto con pensamientos suicidas, quien se encontraba de "vacaciones" junto a su "amigo", si es que así se le puede llamar, Chuuya Nakahara. 

Se aburrió de su celular, la casa se sentía demasiado sola al no escuchar discutir a Osamu y Nakahara de vez en cuando... Oh, ¿no mencioné que ahora vive junto a Dazai, Chuuya y Akutagawa gracias a un contrato de paz? Pues era necesario ya que tenían algunas misiones que requerían que estuvieran juntos, así que para poder facilitar la comunicación decidieron vivir juntos por un tiempo, cada uno con habitación propia, claro. 

La casa no era muy lujosa, sin embargo, era lo suficientemente buena para habitar en ella, era mucho mejor que el orfanato o esa casa en la que se quedaba anteriormente había las suficientes comodidades. Tenía comedor, cocina, sala, dos baños, 4 habitaciones, era perfecto sinceramente. 
¿Cómo pudieron costear algo así? Simple, no lo hicieron ellos, el Sr. Mori fue quien realizó y planeó todo para que pudieran habitar cómodamente la casa, después de todo las misiones era algo que también lo involucraba. 

Aceptaba que era increíble y acogedora, bastante espaciosa, sin embargo, no podía evitar sentirse incómodo y un poco extrañado, el cambio fue repentino si se lo preguntan.

A pesar de que recibía visitas como Kyouka, Kenji o de otros, no podía sentirse cómodo, necesitaba relajarse un poco, todo esto de la nueva casa, el contrato, tantas misiones, haa... era demasiado para él. ¿Pero cómo podría relajarse? Tiene tiempo libre ya que no hay misiones, sin embargo, no es lo suficientemente extrovertido como para planear algo con alguien y salir a divertirse o algo así, tampoco es como si tuviera demasiados conocidos. No podía hacer más que mirar televisión o usar su celular, aburrido. 

Aún sostenía su teléfono en las manos, estaba apagado, vacilaba si volver a prenderlo y entretenerse con algo o recostarse y descansar un rato, una decisión difícil, las dos opciones eran neutras sin diversión o problemas de por medio.
Todavía no terminaba de decidir qué hacer cuando escucho un golpe en su puerta, seguido de eso se abrió lentamente dejando ver al responsable de a poco. Akutagawa Ryunosuke. 

Entro a la habitación y cerró la puerta, se quedó cerca de esta sin decir palabra alguna, no miraba a Atsushi en lo absoluto. Ciertamente era un silencio algo incómodo. 

—¿Akutagawa? ¿Qué haces aquí? — Miró confundido, al contrario, normalmente Aku no era de entrar, así como si nada, siempre había un motivo, ¿cuál sería el motivo de ahora?

Sin respuesta alguna. 

—Aku... ¿Está todo en orden?— Insistió.

—No hay nadie en casa, ¿cierto?— Finalmente palabras salieron de su boca, era algo bajo, pero con el suficiente volumen para que Atsushi escuchara. 

—Si, Dazai y Chuuya salieron a una supuesta misión, pero aparentemente se canceló y ahora están de vacaciones, no sé cómo Dazai convenció a Chuuya de quedarse. — Soltó un pequeño suspiro. —¿A qué se debe la pregunta?—

—...— Se mantuvo en silencio por unos segundos. —Pensé que quizás... Carajo, olvídalo Jinko.— 

Iba a dar la vuelta e irse, sin embargo, fue detenido en ese mismo instante, eran unas manos lo que hizo que detuviera su andar, las manos de su compañero y amante. 

—¿Es... "eso"?— Acertó.

Akutagawa no hizo más que asentir, trataba de disimular su nerviosismo, sin embargo, Atsushi conocía muy bien a su pareja como para darse cuenta de aquella inquietud. Sinceramente el estaba aún más nervioso.