Sueño de polillas

De: Mi

Para: J. L.

¿Alguna vez te has preguntado de que está hecha tú sombra? Yo no, me disgusta, tiende a ser indiscreta, por lo que desprenderla se ha vuelto la razón de porque estoy aquí, tal vez algún día, lograr asustarla para que nunca más regrese. La veo y pienso que es tan sucia, a veces cuando limpio, intento trapearla, pero esa mancha nunca desvanece.

Por eso hace tiempo fui al psicomata, el psicólogo autómata que atiende por mi barrio, siempre está solo, puesto que hay seres vivos que se creen más vivos que el, con justa razón, para comprender una emoción debes de nunca sentirla; pero vi en una película que tratan situaciones especiales, la mía no lo es, por supuesto, pero me veo envuelto en esas palabras que se dicen con los ojos y se escuchan con la mente, la verdad, el psicólogo converso bastante con la voz que acompaña su imaginación, programada por el gobierno como método de control. A mi solo me recetó unas pastillas, las mismas que boto al retrete, como el personaje de aquella película.

Mis mejores deseos.

De: Mi

Para: O. C.

La soledad es igual que abrir los ojos en un cuarto oscuro, siempre el exterior va a ser igual de devastador que el interior. Unos cuantos días atrás busque en internet la cantidad de seres que se puede alcanzar a conocer en una vida, cinco mil personas y doscientos robots, un número exorbitante si se quiere existir sin presencia; de modo que ahora me acompaña alguien solo cuando yo lo hago, dice lo que quiero escuchar y me ve con la misma inseguridad con la que yo lo miro; ¿estaré loco por hablarle al espejo? Yo le pregunte a mi reflejo y no me respondió. Empecé a tomarme las pastillas.

Mis mejores deseos.

De: Mi

Para: B. F.

A veces hay que vivir porque es lo correcto, estas píldoras le han estado hablando a mi sangre, ahora corroe memorias, volviendo el discernimiento cada vez mas ancho, ahora tengo más claro lo que es el bien y lo que es mal, y yo estoy mal, por cierto.

Por lo tanto ahora estoy inscrito a todos los voluntariados que tienen una sonrisa en su folleto, la intento imitar pero no me sale, por ahí he visto qué hay personas que al hablar de amor expulsan una sonrisa, así que he decidido casarme con mi vecina; una buena mujer, mitad robot y mitad humano, creo que les dicen ciborgs de forma despectiva, aunque los llaman así debido al resentimiento, los ciborgs tienen los bronquios RX, adaptados al nivel de polución. Yo me compré una copia japonesa hace unos meses en el centro, escuché atentamente lo que me decía hasta que me distraje, movía las manos como un marionetista, una mano seguía a la otra, tenían una charla aparte, así que las oí cuidadosamente. Fueron unos segundos después que me pregunto que si quería el producto, lo consulté con sus manos y le dije que si sin saber; en fin, pronto te llegará una invitación a la boda.

Mis mejores deseos.

De: Alguien que se hace pasar por mi

Para: P. J.

Perdón por no haber escrito antes, esta situación de estar mas tiempo dentro de casa, cuidarme mas y eso, me ha hecho pasar bastante rato en la calle. Buscar la muerte desprevenidamente se ha vuelto el destino colectivo, como yo lo he hecho, algunas vueltas por el hospital no han sido suficientes, he tenido demasiada suerte, pero sé que en el momento correcto le rezaré al dios con menos cuernos que se me presente.

¿Soy creyente?, claro que lo soy, yo me siento dios en este mundo, soy invisible, he sido tantas veces narrador omnisciente de la vida de otras personas, que ahora les escribo cartas, además he marcado los lugares donde clavarían los clavos cuando me crucifiquen, un lugar en el que duela lo suficiente para ser recordado pero no lo suficiente para que mi sombra me vea morir.