¡¿Me convertí en el villano?! ━ Kazuscara.

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Antes de ir a ver a Tomo decidió que debía cambiarse, estar de forma presentable para la visita era algo escencial para poder agradarle al mejor amigo del protagonista masculino, decidió ponerse una de las camisas de manga larga la cual tenía transparencia para los brazos y solo daba un estilo de cubrir a nada, le gustaba debido a como hacía que se vea, un moño en el centro de su atuendo con una cinta de color negro igualmente solamente completo el look, por último dejo suelto su cabello y está cayó un poco por delante, se miró al espejo y aceptó que se veía hermoso, Scaramouche era hermoso.

En el libro nunca se dió a revelar el porqué a Tomo le caí bien Scaramouche aún cuando todos hablaban mal de el, así que sentía mucha curiosidad sobre cómo sería el mejor amigo que solamente había aparecido unas 50 páginas del libro y de forma virtual unos 20 capítulos.

En cuanto bajó hacía el salón de reunión donde suponía estarían Tomo y Kazuha una de las sirvientas el verlo se acercó rápidamente y con tono educado le informó que los dos amigos estaban en la cocina, tuvo que pedir indicaciones porque cuando la chica intento acompañarlo decidió que iría solo, lo prefería así.

El camino hasta la cocina extrañamente estaba poco concurrido, ni siquiera podía guiarse por el libro dado que nunca se dió muchas referencias de como era la mansión principal de los Kaedehara, así que tuvo que guiarse con los consejos de la muchacha.

El tono del tapiz que cubría la casa empezó a volverse más oscuro mientras avanzaba, cómo si nadie pasará por allí y por ende había sido un sitio olvidado, le pareció muy extraño todo esto, pero aún así siguió aventurandose a seguir adelante, sintió que la temperatura bajaba pero aquello solo hizo que su curiosidad aumentará, hace rato había notado que no se dirigía a la cocina, quizás entre tantas vueltas se perdió y llegó a algún lugar olvidado.

Sus pasos eran lo único que resonaba por el pasillo.

O así era hasta que una voz se dió a escuchar, un suave tarareo se fue escuchando a medida que se acercaba, de la nada y como si fuera un espejimo pinturas donde se retrata a Kazuha estaban colgadas, o bueno, restos de estas, los retratos estaban arrancados en algunas partes y dejaban a ver solo una parte de su rostro como los ojos entre otros, su corazón empezó a latir de dolor y un nudo se formó en su garganta, sentía que lloraría en cualquier momento pero no entendía el porque si hace solo unos momentos estaba bien.

El tarareo dejo de escucharse y dió paso al sonido de sollozos que a medida que se acercaba se hacían más fuertes, después de lo que pareció ser una caminata eterna encontró una gran puerta de color negro y alrededor tapiz color morado aunque cerca de la puerta había un color verdoso, cómo si el aura deprimente de la persona dentro de ese lugar pudiera salir al exterior, con su cuerpo temblando llevo su mano a la manija y con cuidado abrió la puerta, el sollozo se detuvo y cuando decidió adentrarse solamente pudo ver algo parecido a un cuarto con todo lo que estaba dentro totalmente destrozado y poco cuidado.

Ropa, joyas, flores y muebles desparramados por todos lados sin oportunidad alguna de sobrevivir a tal masacre, un pequeño balcón por donde entraba la luz era lo único que iluminaba el cuarto, el tocador era lo único intacto, así que se acercó hasta este y observo muy bien su reflejo, algo detras suyo se movió así que rápidamente se puso alerta empezando a mirar en todas direcciones para captar dónde estaba la entidad.

Algo se posó detrás suyo y susurro a su oído.

━ . .trrraaa. . .habitaaaación.

Dijo la figura antes de desaparecer, dejandolo helado y haciendo que sin más fuerzas cayera al suelo entre las joyas, solo escucho bien la palabra habitación, lo otro no había logrado entenderlo del todo.