El corazón del Dragon -Idia x Malleus-

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(posdata; van a cogerle odio a Malleus)

Pov Malleus

Dos días pasaron con rapidez demaciado para mí gusto . Esta Mañana por fin llegaría el carruaje donde estaría mi futuro esposo y compañero de vida. Me lebante de la cama temprano como de costumbre, me puse un poco más formal de lo normal y baje a saludar a mis padres los cuales se encontraban algo atareados al igual que los sirvientes con los preparativos  para la llegada de mi prometido no se que tanta emoción les daba. Me dirigí asía mi madre la cual estaba eligiendo según yo las cortinas para la habitación de huéspedes que pronto sería la habitación de mi futuro Omega, del estupido rabioso que se cree bella durmiente no sabía nada cosa rara ya que siempre venía a fastidiarme la exsitencia solo con su presencia. Aún que mejor para mí más momentos de calma y tranquilidad los cuales me daba la impresión que no los tendría en un largo largo tiempo. Unas horas más tarde se escucharon relinchar caballos no muy lejos de la entrada principal por lo cual supe además de por el chillido de emoción de mi madre que mi prometido habia llegado . Tanto mis padres como yo salimos a resivirlo, por lo que mi padre me dijo el chico habia  venido con su padre el cual según el estaba muy preocupado de dejar a su hijo solo en un trayecto tan peligroso desde la Isla de los lamentos hacia Night Raven. Cosa la cual la verdad no me creí si algo sabía era detectar gente cínica , superficial e interesada y por lo que me contaban del padre del Omega estaba en esos tres puntos, solo esperaba que su prometido no estuviese influenciado por su padre . El carruaje de unos cabellos un tanto ¿extraños? Se detuvo frente a nosotros, el chófer vajo de una forma elegante hizo una reverencia asia nosotros y después abrió la puerta del carruaje. De este con la ayuda del mismo chófer vajo un señor de unos 40 años en apariencia humana sabría dios cuánto tendría en realidad. Solo vajo el y se hacerco hacia nosotros con una sonrisa para nada real. Por un minuto pensé que su hijo no queria casarse y no se presentó pero mis esperanzas se rompieron cuando el alfa comenzó a hablar.

- Un gusto volver a verlos Señor y señora Draconia espero que ayan gozado de buena salud este debe ser su segundo hijo o me equivoco - dijo mirándome de arriba hacia abajo, como si estuviera evaluando me meticulosamente y tratando de sacarme algún defecto. Tuve que controlar mis expresiones para no mostrar una muñeca de asco. Si así de "bien" me cae el padre no me imagino el hijo - mi hijo esta en el carruaje es un poco tímido 

- así es el es mi segundo hijo Malleus y si me lo dijo anterior mente  - respondio mi madre sin dejar aquella sonrisa tan falsa como las ganas que yo tengo de casarme pero bueno en fin me tocaba presentarme -

- es un gusto Señor Shroud espero cumplir sus espectativas y ser un buen esposo y alfa para su hijo - dije estirando mi mano para chocar la suya me correspondió instantáneamente, decían que la piel de los Shroud era pálida y fría yo no la siento así ¿será que esté hombre no es un Shroud en realidad? Esa era la pregunta que rondaba mi cabeza hasta que mi padre hablo y me saco de mis pensamientos -

- ¿bueno nos gustaría ver a su hijo cree que será posible? - hablo seguro y con un tono fuerte, así era como usualmente hablaba cuando alguien ajeno a la familia estaba presente, algo muy distinto cuando solo estábamos la familia y conocidos cercanos ya que mi padre era una bolita de amor cuando estábamos en confianza y si actuaba así con este hombre eso solo significaba una cosa, que no le daba buena espina -

- ¡¡ Ho !! Por supuesto esperen un segundo ¡¡Idia Shroud sal de ese carruaje ahora mismo si no quieres que te baje a las malas!! - tanto yo como mis padres nos quedamos impactados con el tono que uso con el chico, era tan frío severo y estricto que nos sorprendimos y tanto mi madre como padre fruncieron sus seños, a ellos no les gustaba cuando trataban mal a las personas - perdone el tono de vos pero es que ese niño es un bueno para nada y es un desobendiente IDIA ordenó nuevamente en vos de mando asiendo que desde el carruaje se escuchará un quejido lleno de miedo, poco después una suave, temblorosa y tímida vos se escucho -