HEREJÍA

Capitulo 1:El asesino de bestias

Todo lo que se logra escuchar es el ruido de carne siendo cortada por metal, el reino está siendo atacado y hay un caos total, un hombre está corriendo violentamente por las escaleras del castillo.

Hombre: ¡SEÑOR!¡SEÑOR! ¡ESTAMOS SIENDO ATACADOS!

REY: lo sé, debe ser un enorme ejército.

Hombre: no señor, es un solo hombre y ya mato a la mitad de nuestro ejército.

Rey: ¿A LA MITAD? ¿Cómo un solo hombre podría hacer eso?¿Es un mercenario?

Hombre: no señor, es el líder del ejército de la iglesia del santo patrono, es un mounstro.

Rey: Bueno diles a los habitantes y al resto del ejército que se resguarden en el castillo, yo peleare solo contra ese tipo.

Hombre: pe-pero señor, es muy peligroso.

Rey: Soy el rey de los hombres serpiente, es mi deber como líder proteger a mi pueblo.

Hombre: está bien señor, todo el pueblo confia en usted.

Rey: tranquilo, no hay duda de que ganaré.

*El rey baja al campo de batalla y ve a su ejército ser machacado*

Rey: ¡OYE!, si te detienes ahora y te vas por dónde viniste te perdonaré la vida.

???: ¿perdonarme la vida? yo soy Roma, líder inquisidor de la iglesia del santo patrono y ahora su reino es pertenencia de la iglesia.

Rey: ¿no vas a echarte atrás?, En ese caso tendré que matarte.

*El rey saca una enorme espada mientras que Roma se pone en posición de ataque*

*El rey da un rápido espadazo pero Roma lo detiene con su espada casi sin esfuerzo*

*El rey intenta dar un espadazo pero Roma lo esquiva y consigue darle una puñalada en la caja torácica al rey*

*El rey se retuerce de dolor y Roma aprovecha para sacar una pequeña navaja y empieza a apuñalar violentamente al rey hasta que pareció haber muerto*

Roma: Joder eso ha sido patético, esperaba más del gran rey serpiente. *lo patea*

Rey: ma-maldicion jamás pensé tener que hacer esto contra un simple humano.

*El rey empieza a crecer rapidamente hasta convertirse en una serpiente gigante con brazos que parecían árboles, cualquier rastro de humanidad en el se ha borrado, ahora es solo una bestia salvaje*

*La bestia se abalanza contra Roma, pero este es más rápido, Roma toma la enorme espada del rey y de un solo espadazo corta a la bestia a la mitad*

La gente del reino no lo podría creer su rey, descendiente de la serpiente del pecado original yacía muerto en el suelo como un sucio animal, sus entrañas comenzaban a salirse dejando un olor putrefacto, en su desesperación la gente del castillo solo podía pensar en esconderse.

Roma: que puto asco, estabas podrido por dentro joder. *se tapa la nariz y camina hacia el castillo*

Los soldados no podían quedarse sin hacer nada frente a este mounstro y deciden morir con honor junto a su rey, saliendo del castillo y siendo rápidamente asesinados por Roma.

*Roma entra al castillo donde todos se han escondido*

Roma: *levanta el puño antes de hablar* escuchen todos porque solo lo diré una vez, este pueblo ahora pertenece a la Iglesia Del Santo Patrono, los que estén de acuerdo salgan del castillo ordenadamente y los que estén en desacuerdo pues se joden porque voy prender fuego el castillo.

La mayoría de personas salieron de inmediato mientras que otras personas sabiendo que apartir de ahora serían usados como esclavos decidieron morir en el castillo.

No era una amenaza vacía, pues apenas las personas salieron del castillo Roma lo prendió fuego, lo único que ahora se escuchaba eran los gritos de desesperación de los pueblerinos que estaban siendo quemados.
Roma se llevó al resto de pueblerinos hacía su reino y los entrego al rey como esclavos.
Luego Roma decidió ir a la iglesia a contarle su conquista al sacerdote.

Roma: hola padre ya volví de mi misión.

Sacerdote: como te ha ido hijo mío?

Roma: el reino ya es nuestro, he traído a sus habitantes para que sirvan a nuestro reino.

Sacerdote: has tenido que asesinar a alguien en tu misión?

Roma: s-si bueno solo los estrictamente necesarios señor.

Sacerdote: eso no se oye sincero hijo mío.

Roma: s-s-señor.

Sacerdote: Roma, aún recuerdo cuando llegaste a nosotros, eras un niño salvaje, jamás conociste a tu madre ni a tu padre, así que yo te tome, te alimente y te crié como si fueras mi propio hijo, con el tiempo pensé que dejaste eso atrás y ya eras completamente humano, pero sigues matando indiscriminadamente cómo una bestia salvaje, como un mounstro.

Roma: lo lamento padre, le prometo que trataré de cambiar eso.

Sacerdote: eso espero Roma, porque algún día tendras que responder por tus acciones y dios podría no ser tan misericordioso.

Roma: lo lamento mucho padre, es mejor que me retire. *Roma sale por la puerta de la iglesia*

Luego de salir de la iglesia Roma fue recibido por su ejército quienes lo felicitaban por haber podido realizar semejante misión el solo, cocinaron varias vacas para celebrar y se bebieron lo que probablemente era todo el vino que había en el reino, luego de semejante agasajo Roma decidio irse a recostar en el pasto de una colina para estar lejos del ruido, simultáneamente a esto uno de los esclavos serpiente que ya habían sido asignados se da cuenta de la ausencia de los guardias de su dueño debido que habían ido a la fiesta de Roma, decidió armarse de valor y asesinar a su nuevo dueño, era muy arriesgado pero era su única opción si no quería vivir esclavo el resto de su vida, el plan sale a la perfección y consigue escapar, mientras huia por las verdes colinas logra ver algo que le hela la sangre, el hombre que mató a su rey y a sus familiares dormía plácidamente frente a el, está era su oportunidad de venganza, el odio lo corroía, la adrenalina y la casualidad casi divina que era ese momento lo obligaban a hacerlo y así lo hizo, clavo la espada que utilizo para para matar a su dueño en el pecho de Roma, para cuando esté despertó ya era muy tarde, su asesino se alejaba corriendo y ya no tenía fuerzas ni para arrancar esa espada de su pecho,este era el fin. O eso creía...