Grenade

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Pasaron 2 días y estaban dirigiéndose nerviosos a la batalla final.

Kenma y Nishinoya preocupados por qué sabían que en esos últimos días Hanahaki Disease estuvo empeorando drásticamente.

Hinata trataba de no estar nervioso o asustado, tenía miedo de que Hanahaki Disease le afectará en la pelea, además de que por alguna razón Sugawara se apegaba más a el.

Sabía que era por qué Daichi había vuelto a engañarlo con Kuroo desde que los de el Nekoma llegaron.

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3 días habían pasado y llegaron a el lugar donde se reunirían con los demás equipos.

Bien descansen, los capitanes y vice capitanes tendremos una plática antes de hacer nada.

Dijo Daichi, los capitanes y vice capitanes de Nekoma, Shiratorizawa, Aoba Johsai, Komomedai, Inarizaki e Itachiyama se fueron a un tipo de sala para hablar sobre lo siguiente.

Hinata fue al baño y pensó en muchas cosas, lo principal que hizo fue llamar a su madre cuando se alejo de los demás.

Mamá?

Shoyo, que bueno que llamas!

Cómo están Natsu y tú?

Muy bien, gracias a ti Shoyo.

Eso le saco una sonrisa a Hinata, al menos valdrá la pena después de todo.

Tal vez no llegue a ser jugador de voleibol profesional, quizás antes de morir no vuelva a tocar un balón, ver a sus amigos, familia, pero valdría la pena...

Yo también estoy bien mamá, dentro de 2 días empezará la guerra

Cuídate mucho Shoyo, te queremos de vuelta en casa...

Hinata no pudo evitar soltar una lágrima que bajaba por su mejilla, era doloroso escuchar a su madre diciéndome que quiere que vuelva sano y salvó, sabía que no volvería vivo.

No te preocupes mamá, estaré bien hasta llegar...

Mintió.

Aunque tenía pocas chances de salir vivo, puede que si todo terminaba rápido el podría volver a casa y jugar voleibol por última vez, al menos 1 o 2 días antes de morir.

Prométeme lo Shoyo...

Te lo prometo mamá, debo irme, mis compañeros quieren hablar conmigo

Llámanos antes de que la Guerra empiece, por favor.

Está bien, nos vemos mamá.

Nos vemos Shoyo!

Hinata colgó y se callo al suelo de rodillas, no quería dejar a su madre en este mundo, sola, Aunque tuviera a Natsu.

No pudo evitar llorar, de repente llega alguien con una voz familiar.

Hinata, estás bien?

Hinata sorprendido mira hacía arriba, era el mismísimo Sugawara Koushi quien se veía preocupado por el en esos momentos.

Te estábamos buscando, Kenma y Nishinoya se alteraron al no verte hace al menos 10 minutos.

El menor seco sus lágrimas rápidamente, aunque no podía parar las.

Sugawara se agachó a la medida de Hinata y con su mano derecha levantó el mentón de Hinata, haciendo que lo mirara a los ojos.

El mayor veía el miedo en los ojos de Hinata, lo acerco más y lo abrazo, Hinata no pudo más y abrazo fuertemente a Sugawara.