Lamentos

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Querida Kara;

Hay tantas cosas que quisiera decirte en persona y no lo hago por vil cobardía.

Siempre he guardado mis sentimientos y culpo a los Luthor’s por enseñarme a ocultar esos tipos de emociones, ya que, según ellos, los sentimientos son débiles e innecesarios.

Sin embargo, merezco créditos por, aunque sea intentar ocultar algo que no se oculta,
era inevitable que mis sentimientos salieran a flote .

Supongo que mi enamoramiento era un secreto a voces.  Y te aseguro que los reprimí, los reprimí como no tienes idea.

No quería perder una amistad por algo que
pensaba en ese entonces “pasajero”.

Incluso lo llegué a asociar con admiración.

A pesar de eso, me prometí a mí misma…
me prometí hacerte feliz, no importase cuán difícil sería.

Creo que no cumplí con esa promesa en su totalidad


Eras tú la que me hacías feliz siempre,
en todo momento, con cada sonrisa, cada bromas absurdas  y preocupación hacia mi persona.

Sí te soy sincera, nunca esperé nada a cambio
y es  que estoy tan acostumbrada a no recibir nada de  otros,
sin embargo, mi lado egoísmo tuvo una  pequeña esperanza y era muy testarudo para  rendirse.

Créeme…

no es agradable batallar con el corazón y la razón, a diario.

Pero…

era feliz con tu simple presencia.

Escuchar tu voz, tu risa, y tus pequeños
berrinches, es tan placentero, que ni el mejor plato y más lujoso del mundo puede reemplazar.

Realmente amaba cuando cantabas en las
reuniones de los “súper amigos”.

Me engañaba pensando que eras a mí a quien
dedicabas cada canción.

Y era la mujer más feliz… aunque sea por engaño.

Aquellos pequeños detalles me tenían rendida,
caía sin querer en un encanto fascinante…
supongo que te idolatre tanto y mis
expectativas eran más grande que mi razón.

Pero no todo es color…
he luchado conmigo misma en todo este tiempo,
tratar de negociar con mi testarudo corazón para  seguir con nuestra vida,
con nuestro día a día,
haciéndole falsas promesas…
pero solo lograba engañarlo en su momento.

Necesitaba entrar en razón, ver la realidad.

Me enojé conmigo misma, me enojé por mi
desordenado control,
porque nunca he dependido de  nadie y ahora
mi tranquilidad dependía de un ser
(jodidamente hermoso) que ni siquiera lo sabe…
O  eso supongo yo.

Dear Kara <<Oneshot - Supercorp >>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora