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Luzu regresaba de un largo día de minar, venía contento ya que había logrado encontrar muchos minerales que le servirían para su día a día, además de unos materiales muy lindos para su casa y unos cuantos diamantes.

Aun que por otro lado estaba algo fastidiado por caminar tanto. ¿Por qué no vine en caballo? Pensó, pues no recordaba haberse ido tan lejos a minar. Se detuvo cerca de un lago para lavarse la cara por la tierra que tenía en su mejilla y aprovecho en tomar un poco de agua, mantenerse hidratado es importante chicos.

Se secó la cara con la manga de su suéter, se levantó y estaba a punto de irse cuando escucho un pequeño "Quack" cerca de el, volteo por todas partes para buscar a aquel pato pero no logro ver nada, se levantó restándole importancia y volvió a retomar su camino. Solo pasaron segundos para volver ah escuchar un "Quack" más cerca de él.

Se tomó el trabajo de buscarlo, se quedó callado unos segundos para escuchar atentamente de dónde provenía el graznido, volteo a su izquierda viendo un árbol grande y, abajo de el, cerca de unas ramas grandes, vio una pequeña bola amarilla moviéndose violentamente.

Luzu se acercó al árbol, observando al patito dándose cuenta que esté estaba lastimado; su pequeño hocico estaba sucio y se le veía un raspón en lo que se podría decir su mejilla, una de sus alas estaba lastimada y su patita derecha estaba atrapada entre dos ramas del árbol.

— Hey... Hola amigo, ¿Que te paso? Permíteme ayudarte— hablo tranquilo Luzu, se arrodilló cerca del patito eh intento ayudarlo ah salir de ahí cuando esté empezó a moverse violentamente otra vez, casi con miedo, llegó a pensar — ¡Wow!— retiro rápido sus manos y las levando en el aire — Tranquilo... No te haré nada... Solo quiero ayudarte, ¿Puedo?.

El patito se le quedó viendo, se le notaba la desconfianza en sus ojos, pero muy en el fondo de él sabía que podía confiar, dejo de moverse ya que al hacerlo solo se lastimaba más, él lo sabía, no era tonto, era un pato pero no era estúpido... Oh no mucho al menos, volvió a mirar a los ojos rojos de ese tipo, y con un "Quack" le dio a entender que podía ayudarlo.

Luzu lo entendió, se quitó la mochila para quitarse su suéter y poner al pato dentro de él como forma de protección, se acercó a las ramas del árbol que atrapaban la patita de aquel patito amarillo, y con mucho cuidado logro romperlas dejándolo libre, el patito agradecido se acercó como pudo a una de sus manos y restregó su cabeza en ella, luzu sonrió, se le hizo una acción muy linda, tomo al patito con cuidado y lo puso dentro de su suéter que ahora parecía un nido, se volvió a colocar la mochila y tomo "el nido" entre sus brazos y se levantó.

— Estás muy lastimado, quisiera saber que te paso pero por ahora te llevaré a casa para curarte y cuidarte, un poco de compañía no me haría mal, ¿Que dices?— el patito grazno de acuerdo, ya había pasado por muchas cosas como para no dejar que lo cuidarán y consintieran, valla, se sentía como un rey ahora.

— ¿Debería ponerte un nombre? Tienes cara de Ricardo... ¿oh qué tal Beto? ¿Te gusta?— el patito lo veía a los ojos, y solo negó, Luzu asintió con su cabeza— No te gusta Beto, entiendo... bueno, creo que podemos preocuparnos del nombre después— dijo como último para empezar a retomar su camino a casa, observó donde estaba, no le quedaba mucho camino de todos modos, al pasar unos 10 minutos observó su casa de lejos, y al lado de ella, dos de sus amigos, sonrió y al fin cuando llego a su casa, se les acerco.

— Rubius, Alexby ¿Que les trae por aquí?— sonrió.

— ¡Hola Luzu!, Queríamos ver si querías acompañarnos a pescar, Vegetta está ocupado arreglando su casa, Fargan no se ha aparecido en días, y la verdad no tengo ganas de soportar a Staxx— hablo Rubius, uno de sus amigos con unas curiosas orejas de oso, de cabello albino y piel lechosa, bastante alto y con un grande amor a las bromas y el caos.

Encontré un lindo patito// LUCKITY// ONE-SHOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora