Abrí lentamente mis ojos encontrándo a mi lado a mi novio, Cheng.
Nuestra relación lo saben mis compañeros, pero no lo saben los medios.
Las fans solían atacarme por cualquier error que haga, por cualquier cosa que diga.
No leía los comentarios porque sabía que estos estaban relacionados conmigo y mis errores.
—¿Estas meditando?—Dijo una voz.
—Oh, no, sólo que recién me despierto—Dije con una media sonrisa.
El me miró, inspeccionando mi rostro con una media sonrisa.
El a veces solía ser serio con todos, pero conmigo se le quita eso. Es cariñoso, lo amo y el me ama.
—Te ves bonita hasta cuando despiertas—Dije acariciando mi mejilla.
Sentí mis mejillas arder con tan solo un toque de el.
—Y tu siempre te ves bonito—Dije nerviosa.
El asintió con una media sonrisa, el también sabía eso.
—Debe estar el desayuno listo, bajemos—Dije queriendo escapar de lo nerviosa que estaba.
Iba a levantarme de la cama, pero el me agarro del brazo, no ponía presión.
—Vamos, dame un beso primero—Dijo.
—Solo en la mejilla—Dije sonrojada.
El asintió bufando.
Yo acerque mi rostro hacia su mejilla dispuesta a darle un beso pero el volteo su rostro así haciendo que mis labios choquen con los suyos.
El movió sus labios, yo moví los míos sin importar a sentir mis piernas completamente temblorosas.
Puso su mano en mi cintura acercándome a él, apretaba levemente esa área.
Mordía levemente mis labios y volvía a besar sin control, sus manos se movían tocando mis muslos.
—Eres tan hermosa—Dijo besando mi cuello.
Solté unos suspiros al sentir una buena sensación en esa área, esto iba más adelante de lo pensado.
Sentí su mano apretar mi trasero, y allí me di cuenta que probablemente nuestros compañeros nos escuchen.
Solté un leve gemido al sentir otro apretón en mi trasero.
—Nos escucharán, paremos con esto—Dije parando el beso.
El me veía con cariño, veía mis labios gustoso de volver a besarlos.
—No nos escucharán—Dijo pegandome a él, besaba mis mejillas con cuidado.
—Si nos escuchan seta vergonzoso—Dije abrazándolo.
—Es normal en las parejas, vamos; dame otro beso—Dijo besando muy cerca de mis labios.
—Te daría miles de besos, pero tenemos una práctica pendiente y tu eres el capitán—Dije acariciando su cabello.
El asintió soltando el abrazo.
—Tenemos pendiente los mil besos que quieres darme, cariño—Dijo besando mi mejilla.
Ese lindo apodo..
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Al ir a la planta baja pude ver que estaban desayunando, no habían escuchado nada y eso es lo que me alivia.
—Buenos días—Dije sonriendo.
Los demás me respondieron el saludo,me senté en la mesa junto a Cheng.
