QUIEN ES OLIVIA BUTTERFIELD © Saga. 𝑅𝑜𝑦𝑎𝑙 𝑀𝑎𝑓𝑖𝑎

Capitulo 00 · 𝐿𝑎 𝑐𝑒𝑛𝑎

La cena.

Olivia Butterfield

15 de diciembre, 2018. Londres, Inglaterra.

El dulce aroma Bleu de Chanel de Justin perfuma el auto.

Las luces navideñas que adornan las calles y las casas se reflejan en el volvo de mi novio, cada avenida que tomamos está decorada, y las personas en las calles caminan con ropa de abrigo, guantes y grandes bolsas llenas de regalos. Pasamos por el Tower Bridge, que en estos momentos se ilumina dejando al descubierto su espléndida arquitectura neogótica.

Un hermoso suéter beige de doble botón cubre mis hombros, un vestido rojo corto enaltece mis piernas, y unos refinados tacones que hacen ruido cada vez que daba el paso, termina por embellecer mi atuendo. No puede faltar mis labios escarlatas y una sombra sutil y desvanecida alrededor de los ojos, resaltando aún más la mirada azul.

Mientras Justin maneja, mi pierna se menea de un lado a otro, ansiosa, era de aquellos movimientos propios del cuerpo.

─ Amor, calma ─ Pronuncia mientras arquea su sonrisa y me dedica su rasgada y seductora mirada.

Miro mis piernas y las detengo al notar el movimiento. El, sin embargo, pone su mano en mi pierna mientras que con la otra maneja, pasa una y otra vez su mano cálida sobre mi piel, acariciándome, y esta no disimula en erizarse.

─ ¡Estoy emocionada! ─ Tomo su mano y estrecho mis dedos con los suyos.

Vamos al Marcus Wareing sobre la calle Wilton place, un lujoso restaurante inglés cuyo dueño es de los mejores chefs de Europa. En aquel lugar nos esperaban nuestros más allegados amigos: Sophie, Robert, Megan, Keith, y Chris.

Al llegar, el valet parking recibe la llave del auto de Justin, nos tomamos de la mano y caminamos siendo el foco de miradas de todo aquel que pasaba por nuestro lado. Somos, indudablemente, la pareja más hermosa en aquel lugar.

Al entrar al bufé, lo primero que nos envuelve es la melodía de Frank Sinatra y el aroma a menta y pino. En el recibidor, un joven mesero con traje negro y corbatín azul educadamente nos atiende.

ㅡ Buenas noches, ¡bienvenidos! ¿Tienen reservación? ㅡ Preguntó, lleva un delgado libro negro entre sus brazos.

ㅡ Sí, a nombre de Justin Greene ㅡ Contestó mi galante novio.

El mesero de inmediato abre aquel delgado libro y se dedica a buscar entre la lista de reservas el nombre de Justin, pronto lo encontró, nos permitió pasar al opulento restaurante.

ㅡ Siga caballero, sean bienvenidos.ㅡ Respondió al final el carismático anfitrión, quien no disimulo en ningún momento llevar su mirada a mi busto y mis piernas. 

Pasamos entre las mesas, Justin camina detrás de mi tapando el ceñido vestido en mis caderas, pues se resalta el dote más sublime de mi cuerpo: mi culo. Las personas nos miraban sin disimulo, siendo una vez más el gran espectáculo nocturno, hasta ver, por fin, a Sophie y los demás en una mesa al lado del ventanal del restaurante.

ㅡ ¡Olivia! ㅡ Exclamó Sophie levantándose de la mesa y caminando hacia mí. Me abraza fuerte mientras Justin pasa a saludar a los demás. La rubia me mira de pies a cabeza y suelta una coqueta sonrisa.