Nathan, Carmelin y Conari eran tres amigos inseparebles.
Nathan estaba enamorado de Conari y ella también de él, pero ninguno de los dos lo sabía.
Un día estaban los tres amigos en la escuela, ese día era el cumpleaños de Conari e invitó a sus dos mejores amigos a su casa porque ahí hiba a hacer su cumple.
Después de la escuela Nathan y Carmelin fueron juntos a comprar el regalo para Conari.
Conari se fué directo a su casa con su hermana en el autobús. Apenas llegó a su casa, se preparó para el cumple, limpió, ordenó, y se arregló muy bonita, esperando a sus amigos.
Un rato después llegaron, muy ansiosa abrió la puerta y los saludó, al entrar a la casa se fueron hacia el segundo piso, se fueron a una habitación y se encerraron.
Escucharon música, jugaron verdad o reto, conversaban muy alegres hasta que Nathan empezó cada vez a hacer más y más pervertido. Cerca de esa habitación estaba el cuarto donde Conari y su hermana dormian. Nathan tiraba a Carmelin a la cama y hacia como se estubieran...emm... ya se lo imaginan, y a Conari la dejaban a un lado. Conari al ver "eso" que hacían, se hiba a un rincón y se ponia en posición fetal e intentaba ignorarlos.
Cuando ya terminaron de bobear, a Carmelin le dió sueño y se estaba quedando dormida, y como a Conari la dejaron a un lado ella también empezó a bobear con Nathan, pero no como lo isieron ellos, se sentaron y pusieron una almohada adelante de cara haciendo como se daban besos, pero no lo hacían hasta que Nathan, como estaba pervertido, se hacercaba más y más hasta que le robó un beso a Conari pero no cualquier beso, uno muy apasionante. Conari como no sabía que hacer, sólo se dejó llevar, y cada vez Nathan lo disfrutaba más y más.
Luego como Nathan estaba tan pervertido, apagó la televisión y la luz de la habitación, y esperó que Carmelin se durmiera para seguir besando a Conari.
Ella se fué de la habitación a acostarse en la cama, y Nathan la siguió y se acostó al lado de ella, y otra vez comenzó a besarla, pero la respiración de Nathan era entre cortada y temblaba un poco, era lo mismo que le pasaba a Conari.
La madre de Conari los llamó para cantar el cumpleaños feliz. Al terminar de cantar y de tomar té, subieron rapidamente a la habitación donde estaban y se encerraron y comenzó todo de nuevo, Nathan y Carmelin se fueron a bobear y dejaron a Conari a un lado, y ella se fué a un rincón a ponerse en posición fetal e intertar ignorarlos.
Luego de un rato fueron a buscar a Nathan y a Carmelin, bajaron pero a Nathan se le quedó su mochila y Conari lo acompañó a buscarla, donde arriba empezaron a darse besos, y Nathan le preguntó si quería ser su novia y Conari le dijo que sí.
Bajaron como si nada hubiera pasado y actuaron lo más normal posible hasta que se fueron.
Cuando Nathan y Carmelin se fueron, Conari abrió los regalos Nathan le regaló un panda y Carmelin le regaló un muñeco de una vaca.
Conari esa noche durmió con el panda que le había regalado Nathan. Durante la noche Conari se despertaba a cada instante por estar pensando en Nathan y a él le pasaba lo mismo.
