{OS - Parte Única}

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El mar era una jungla cruel, en donde te enfrentabas a todo tú solo

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El mar era una jungla cruel, en donde te enfrentabas a todo tú solo.

Ni amigos, ni padres ni hermanos: allí, todos eran tus enemigos. Los peces pequeños huían, y los grandes te perseguían hasta devorar tu último trozo de piel, tu último hueso.

El mar no era un juego.

Pero ahí tenían al primer inexperto-idiota, intentando cruzarlo con su aleta azul verdosa, y sus ojos celestes aqua. Era un principiante, un total inepto al momento de controlar sus poderes o escabullirse del peligro según mis conocimientos.

Yo lo veía divertido, desde la lejanía.
El pobre estúpido intentaba escapar de los largos tentáculos del kraken, una criatura mística más vieja que la primera fábula. Era todo un espectáculo que, desde luego, no me lo perdería para nada.

- ¿Te parece graciosa su desesperación? -

Una voz femenina sonó detrás mío y rápidamente me encogí de hombros, indiferente.

- Me da risa su voluntad -

Nadie en este mundo horrible conocía ya esa palabra; el mundo de los cuentos de hadas era una mierda con piernas y cara bonita, que disimulaba el horror que vivían sus personajes.

Mi "familia" entera lo estaba viviendo en carne propia, desde hace muchos años ya.

La voluntad entre ellos era ahora un mito más.

Pero aquel sireno...luchaba como un enorme pez contra las enormes olas que se alzaban en el mar; se zambullía en el fondo y volvía a salir, sin rendirse.

Yo podía ver su cabeza desaparecer y aparecer tres veces por minuto; y, no me preocupaba realmente, pero si llamaba mí atención...

¿La razón?

Sus escamas brillaban demasiado, y su color era muy claro, lo cual demostraba que era un sireno joven; además, su torpe nadar contra las olas demostraba inexperticia en la superficie, lo cual podría considerarse como un suicidio.

El kraken es una criatura experta, que conoce todos los secretos del mar y sus mañanas; si estaba allí, era por órdenes directas de la reina Ariel, y no por voluntad propia. El viejo y enorme pulpo sabe cuan riesgoso es salir al mundo exterior, al mundo de los humanos; por lo cual, no saldría si no fuese algo extrictamente necesario.

- Le diré a padre que uno de sus tantos enemigos están aquí -

- Capitana... - murmuré, sin enfrentarla directamente.

- Sí tu no piensas ayudarlo, yo sí - sus pesadas botas resonaron, tanto en el suelo como dentro de mi cabeza - somos piratas, no personas sin alma.

Quise reírme, lo prometo.
Era una gran farsante cuando se trataba de quedar ante todos como la buena.

Entonces el enorme barco dio vuelta a los pocos minutos, encaminándose hacia el gran alboroto. Suspiré, sujetándome de los barandales de madera para no caer y ser un problema más; vi como Satruere cruzaba hábilmente por las lianas, intentando llegar a la cofa; parecía un niño, brincando por aquí y por allá, lleno de vida.

fairytaləs & liəs ☆ yəonbin/soojunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora