The Lazy Devil

Capítulo 7: Regreso al Inframundo

Sona se había dado cuenta hace mucho tiempo de que su amigo Naruto no podía entender la indirecta. Decirle que no era esencialmente decirle a un pez que no nade, el rubio era extremadamente persistente. Cuando irrumpió en su oficina como solía hacer, esencialmente le dijo que lo guiara por la ciudad. Después de una agotadora serie de negativas, Naruto simplemente la secuestró de su oficina. Su nobleza simplemente observó cómo se desarrollaba toda la situación desde un costado, mientras que Saji parecía querer interferir con Tsubaki por alguna extraña razón que lo mantenía bajo control. Ahora, Sona estaba paseando por las concurridas calles de la ciudad de Kuoh con un rubio demasiado excitable arrastrándola.

"So-chan, no te ves muy feliz". Naruto reflexionó haciendo un puchero levemente ante su clara molestia. "Es como si no quisieras venir en esta cita".

Sona sintió que sus labios se afinaban cuando simplemente le dio a su amiga una mirada exasperada. "Me sacaste a rastras de mi oficina temprano en la mañana. Podría estar terminando el resto de mi papeleo, no deambulando sin rumbo por la ciudad".

"Mo, So-chan, eres tan mala conmigo".

Antes de que pudiera soltar otra respuesta sarcástica, Naruto la arrastró a una boutique al azar repleta de vestidos. El empleado vio su entrada e inmediatamente comenzó a lanzar un argumento de venta. Fue muy contundente cuando prácticamente empujó a Sona al vestidor con un montón de vestidos a cuestas. Una vez que se quedó sola para cambiar, Sona debatió si quería o no simplemente teletransportarse, pero decidió no hacerlo. Naruto tenía casi un sexto sentido sobre dónde encontrarla, teletransportarse solo retrasaría lo inevitable. Mientras reflexionaba sobre su próximo movimiento, inconscientemente se puso uno de los muchos vestidos solo para volver a la realidad al ver su generoso despliegue de escote.

Volviendo a ponerse el uniforme escolar, Sona se fue a toda prisa asegurándose de sacar a Naruto de la tienda antes de que la mujer sacara más vestidos escotados para que se los probara. "¿Puedo volver a la escuela ahora?"

"¡Nop! ~" Naruto negó rápidamente. "Tenemos algunas cosas más que hacer".

"¿Me gusta?"

"¡Visitar el hotel del amor y follar como conejos en celo! ~"

"¡Absolutamente no!"

"¡Pero ya puedo imaginarnos haciendo el tango desnudos! ~"

"¡NO!"

Haciendo un puchero una vez más, Naruto simplemente suspiró derrotado. "Bien, nada de love hotels, claro, hoy no eres divertido, So-chan".

"¿Qué tal un almuerzo?" Sona sugirió usar su mano libre para masajear el puente de su nariz. "Estoy seguro de que podemos encontrar algún restaurante dispuesto a llenar ese pozo sin fondo que llamas estómago".

"¡Conozco el lugar perfecto!"

Tomando las manos de Sona, Naruto la condujo por la bulliciosa ciudad hasta que llegaron al lugar en el que pretendía comer. Mirando el establecimiento con total disgusto, Sona frunció el ceño inquietantemente a su amiga. "¿Un café de sirvientas?"

"¡Sí! ~"

"Me voy."

"¡Espera, So-chan, es solo el almuerzo!"

"¿Solo almuerzo?" Sona reiteró mientras cruzaba los brazos ante el descarado deseo de la rubia de ver a las mujeres en trajes de sirvienta. "¿Por qué me degradaría cenando en un maid cafe?"

"Tengo un cupón para un Pika Pika Parfait, podemos turnarnos para alimentarnos". Al ver el ceño fruncido de Sona, Naruto cedió de manera derrotada. "Bien, podemos ir a otro lado".