submissive succubus ;; jaeyong

III/III

—Esto es lindo, puedo tomar tu virginidad dos veces.

JaeHyun mordió su oreja ligeramente para luego recorrerla con su lengua mientras continuaba estirando con los dedos el agujero de TaeYong.

—Ah...  Ngh... J-Jaehyun...

—¿Sí, cariño?

—Suficiente. Mngh... L-listo. E-estoy más que listo, Jaehyun

Conforme su cuerpo se sentía más caliente y necesitado, los gemidos de TaeYong gradualmente se volvían más agudos y trémulos.  

—Está bien. Si tú insistes, bebé.

Rápidamente JaeHyun removió sus dedos haciendo que TaeYong gimiera mientras sus muslos temblaban y, acto seguido, acercó la cara sonrojada del chico a la suya, dando inicio a un beso lento y húmedo.

—Abre la boca, precioso.

El chico atrapado debajo de él obedeció. JaeHyun deslizó su lengua y exploró con ansias la boca de Taeyong, cual sediento en pleno desierto. TaeYong se inclinó más cerca y devolvió cada roce exigente entre sus bocas mientras dejaba que su lengua se arremolinara alrededor de la de Jaehyun.

—Buen gatito.

JaeHyun sonrió y continuó besándolo hasta el cuello, el hombro y sus clavículas, luego se posicionó listo para entrar en el más que maltratado agujero del chico.

—Maldición. ¿Tienes alguna idea de lo jodidamente bonito que te ves en este momento?

Admiró la vista erótica frente a él y agarró los glúteos de TaeYong, separándolos. Perfiló su miembro en el medio y lentamente empujó el glande de su miembro en el fruncido y palpitante anillo rosáceo de TaeYong.

Taeyong jadeó y entró en pánico cuando se dio cuenta de que su cuerpo humano no podría soportar el enorme y duro eje en comparación con su lado súcubo.

—¡Ahhh! ¡E-espera, Jae-Jaehyun!

—Solo relájate, bebé —ronroneó el humano contra los labios de TaeYong, calmándolo mediante lentos, pero no por ello suave besos, exigiéndole su sumisión.

—E-espera Jae. Espera. Lo siento, no puedo. Todo eso no encajará en mí... Tenemos que parar.

—A mí me parece ese detalle, sé muy bien que te gusta cuando te hago sentir lleno por dentro. No pretendas que no es así.

—N-No lo estoy. Por favor, Jaehyun. Ya estoy bastante lleno por dentro, no puedes ir más allá de esto- ¡ahh!

Las palabras fueron interrumpidas cuando JaeHyun empujó de manera profunda y brusca su erección en el apretado pasaje, forzándose hasta el final.

—Ahh... Ngh... D-duele a Jaehyun. Es-estás demasiado profundo. Por favor, sácalo.

Las lágrimas comenzaron a formarse en los ojos de TaeYong, levantando la mirada para encontrarse con los ojos castaños adversos.

—P-por favor Jaehyun. Lo siento. No creo que podamos hacer esto. N-no puedo. Es demasiado.

TaeYong se inclinó hacia él basta que sus frentes se tocaron tocaban mientras su cuerpo se sacudía de un lado a otro de manera obstinada y con tal fuerza que abría y dilataba su interior.

JaeHyun suspiró.

 —Tú sí que implicas mucho trabajo  —se quejó JaeHyun, deteniendo cualquier movimiento y volvió a acostarse sobre TaeYong que sollozaba, sin retirarse—. Solo respira Taeyong. Trata de relajarte. No me moveré. Solo siénteme por dentro. Reemplazaré todo este dolor con placer. Confía en mí, bebé, ¿de acuerdo? —Presionó suavemente sus  labios sobre a los adversos, al mismo tiempo que se empujaba lentamente, tragando todos los gemidos y lloriqueos de Taeyong.