26.- Extractor de Leche

573 41 3
                                    

𝓩𝓸𝓢𝓪𝓷    

•••

En la cubierta del Sunny, específicamente en el césped. Se encuentra Zoro quien ya hacia sentado en un camastro largo de madera mientras sostenia en brazos a su pequeño bebé Sora, alimentandolo por medio de un biberón.

Después de varios minutos, notó que Sora había terminado de vaciar el biberón pero de alguna forma, seguía succionando.

—Sora, te has acabado toda la leche. Ya no hay más— Decía Zoro tratando de apartarle el objeto pero Sora parecía no querer soltarlo.

—¿Aun tienes hambre?— El bebé arrugaba la cara a punto de llorar como respuesta—. Bien, vamos por otro más.

Zoro se levantó de aquella silla y subio las escaleras dirigiéndose a la cocina.

~~~

Sanji ya se encontraba más estable y alegre. Hacia días atrás que lo visitó Law y Kid, las cosas parecían ir de maravilla. Tomó los consejos de Torao y ahora reactivó su vida regresando a la actividad que más le apasiona. Eso claro, con el apoyo de Zoro quien ahora cuidaba más seguido a Sora pero no descuidaba por atender también a su bebe y a su pareja.

Ahora estaba preparando un gran banquete para la tripulación, alegremente cortaba verduras y se aseguraba de que la carne estuviera en término perfecto. En el risotto debía prestar atención asegurando que no se quemara mientras agregaba el condimento para que ese caldo supiera de los más exquisito.

Quería que esta comida fuera de lo más sabroso que todas las comidas que había preparado antes, a diferencia que ésta fuera más especial e inspiradora.

Zoro entró a la cocina y saludo a Sanji, quien lo veía animadamente, dándole un beso rápido en los labios. Luego, Sanji saludo y depósito un casto beso en la frente de su bebé. Zoro se dirigió a la nevera para tratar de sacar un nuevo biberón lleno pero se topó con la sorpresa de que ya no había mas. Inmediatamente se lo informó a Sanji.

—Oye Sanji, no hay más biberones llenos y Sora parece que aún no sacia su hambre.

—Pero ¿No acabas de alimentarlo hace rato?

—Si. Pero esta pidiendo más.

Le mostró a Sanji el biberón ya vacío. Sora al ver aquel objeto enfrente, trató de alcanzarlo estirando sus bracitos con desespero.

—Ya veo. Bueno, dame un minuto.

Sanji se quitó el mandil y bajo las flamas de la estufa. En eso venía entrando Robin, por suerte.

—Ah! Robin— mencionó Sanji con alegría.— ¿Podrias ayudarme aquí? Tengo que ir a preparar más leche para Sora. Acaba de terminarse la porción que tenía en la nevera.

—Por supuesto que si Sanji— respondió la arqueología entusiasmada.

—Te lo agradezco— después dio instrucciones.— uh, si tardo un poco en regresar, por favor, apaga la carne que esta en ese sartén en diez minutos. El risotto ya casi estará en cinco minutos.

—Entendido. No te preocupes que yo me ocuparé del resto.

Después de mencionarle que después vendría a preparar lo demás, Zoro y Sanji salieron de la cocina con dirección a su habitación. Al llegar, el rubio tomó una ducha rápida mientras le pedía a Zoro que buscará aquel artefacto con el que se apoyaría para extraer la leche.

Después de que Zoro recostó a Sora en medio de la cama (ayudado por uno de esos cojines para evitar que el bebé se moviera demasiado) comenzó a buscarlo en las cajoneras, Zoro dio con una caja trasparente que dentro de ella parecía tener algunas piezas armables. Fue a lavarse las manos antes de montar y preparar dicho objeto.

Nuevos Caminos, Nuevos Comienzos ║ #admpreg2022 #ilitiaforeverDonde viven las historias. Descúbrelo ahora