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Suspiro con fuerza las malditas clases ya habían comenzado y le tocaba estar sentado en el ultimo asiento de todo el gran salón, se maldijo con gran fuerza cuando su mente le jugo una mala jugada imaginando lo suave y caliente de su cama bajo su tacto, se detuvo en seco de lo que estaba tocando cuando escucho un pequeño jadeo a semejante a un chillido, giro lentamente su cabeza como si tuviera miedo de ver lo que sea que estuviera a su lado a su lado vio a un chico rubio mirándolo con estupefacción, por un par de segundos se pregunto por que lo miraba de esa forma.

Arqueo su ceja levemente para volver a apretar lo que sea que estuviera apretando y cuando lo hico se puso aun mas pálido de lo que ya normalmente era, por que el chico a su lado volvió a chillar y cerrar sus ojos con vergüenza, lentamente bajo la mirada y se dio cuenta que estaba agarrando el muslo contrario.

 Di un grito tirándose para atrás con gran fuerza haciendo que se caiga de su asiento casi de inmediato, perplejo se quedo mirando al techo sin tener la suficiente valentía de dirigirle ni la mirada al chico. lo único que se le ocurrió para calmarse y tener mas valentía fue tararear una de sus favoritas canciones.

Woah, we're half way there - musito en susurros, su lobo por alguna razón se comporto realmente ansioso y para nada le ayudaba eso -  Woah, livin' on a prayer - trato de calmar a su lobo, pero cada segundo se ponía mas ansioso.

se levanto con fuerza como si su cuerpo estaba moviéndose por si solo, tembló un poco por lo rápido que se paro, su cabeza no lo había procesado aun por lo que le dio mareos, pero antes de que reaccionara se encontraba sentado y mirando al chico de su lado, sutilmente lo olfateo sintiendo un olor dulce y tentador, definitivamente olor a omega

"Alfa pevertido" penso, ya sabia por que estaba reaccionando así era por el omega, negó en sus adentros "shooky no otra vez, el no es si?"

"YOONGI!! el es confia en mi"

"No shooky, la otra vez me dijiste lo mismo y ya sabes como termino todo eso"

"Es que.......tenia su aroma" lloriqueo haciéndose bolita 

Lo pensó solo un poco, la primera vez que lo dijo fue con una chica "Suran" una chica delgada con buena figura para decir verdad, cara perfilada muy similar a la de una muñeca de porcelana, ojos rasgados cual gato, era imposible no soltar un suspiro por esa mujer, pero para ser sincero al pálido no le llamo tanto la atención, mas si a su lobo que olfateaba gustoso "frutos secos, margarita y toques de frambuesa" la conoció de casualidad en la plaza cuando su lobo literalmente lo obligo a hablarle.

Hola - dijo sin pensar bien en que decir, vio como la chica se detenía viéndolo entre confundida y alegre.

Hola - sonrió en grande, hubo un pequeño silencio por lo que la chica ladeo su cabeza hacia un lado confundida - solo me venias a decir eso?

S.i digo..no! queria pedirte tu numero claro, si se puede - carraspeo su garganta con algo de incomodidad, levanto un poco su pecho para verse algo seguro de lo que estaba haciendo.

- rio suave y asintió acercándose un poco al pálido - claro que se puede - agarro su pequeño bolso sacando una libreta y un lapicero apuntando en este su numero y arrancar la hoja  entregándoselo, después de eso salió casi corriendo, meneando sutilmente sus caderas de lado a lado, por alguna razón se rio parecía que se esforzara por moverse de esa manera por que se veía como si estaba trotando.

después de eso las salidas de ellos dos eran muy seguidas haciendo un cariño que fue creciendo, esa amistad se volvió en noviazgo.

hasta que un día decidió hacerle una pequeña sorpresa por su cumpleaños por lo que se adentro a su departamento cabe recalcar que su pareja era mucho mas mayor que el -20 a 16 -pero no lo supo hasta hace muy poco pero ni le importo, empezó a ordenar todo, inflar globos y colgarlos por todo el techo con serpentinas del mismo color de los globos "rojo" cuando acabo, dejo su regalo en la mesa.

 a lo lejos escucho las llaves así que corrio lo mas rápido que sus paliduchas piernas le permitieron, hasta la mesa escondiéndose bajo esta, escucho chasquidos y risas pero no le tomo importancia, como veía que no se dirigía hasta la sala decidió salir de su escondite, caminando hasta el pequeño corredor que iba hasta la entrada principal - grave error- cuando  asomo su cabeza no pudo evitar soltar un mar de lagrimas, inmediatamente se tapo la boca para no soltar ningún ruido 

"maldito" grito el lobo en su interior, desgarrando el interior del pálido con rabia  

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