Moria de frío y la lluvia no pensaba detenerse, las gotas corrian por mi piel como aquellas manchas rojizas que estaban en mi camiseta las cuales también se escurría por mis labios, tenía un sabor metálico.
Me sentía asqueada en esos instantes, sosteniendo aquella hacha con mis manos temblorosas, sintiendo la fría lluvia caer sobre mi cuerpo lleno de moretones y sangre. Sentía mis piernas querer fallarme, pero me mantenía lo más fuerte posible hasta poder llegar a aquel grandioso callejón que por suerte no tenía caminantes. Mis manos frías y temblorosas intentaban no soltar aquella hacha pero era inevitable,
gracias a los golpes del hombre que supuestamente me amaba apenas podía mantenerme de pie, fue tan grande la paliza que pensé que me mataría.
Intenté incorporarme al instante en que mis piernas dejaron de funcionar y termine cayendo de rodillas, Dolía, dolía demasiado aquella herida. Solté un leve gemido, arrastrándome hasta lograr esconderme en un callejón, rogaba que alguien me encontrara antes que esos come cerebros. A lo lejos vi a un hombre cabalgando mientras era encerrado por una multitud de zombies
-Oh mierda pobre caballo-
dije antes de tomar la fuerza suficiente para levantarme
-no puedo dejar que se coman vivo a aquel hombre ¿o si?-
me intente acercar un poco hasta que sentí una mano tapar mi boca y rodearme con su brazo impidiendome gritar o siquiera moverme en ese instante solo pude pensar lo peor, casi de inmediato mis ojos se cristalizaron pero en ese momento me soltó y pude ver a un chico asiático que por alguna razón me transmitía confianza. Había sido una batalla y tenía miedo, mucho miedo pero me sentía tranquila con el.
Me dijo que me mantuviera en silencio mientras ayudaba al hombre que al parecer se había refugiado en el tanque.
Mi respiración estaba entrecortada pero como pude me mantuve en total silencio. Luego de que el hombre llegará a salvo con nosotros, no sin haber disparado unas cuantas veces. Como se notaba que no sabia que el ruido los hacia enfadar aun más pero no tenía fuerza para reclamarle, subimos lo más rápido que pudimos al techo del edificio y cuando al fin llegamos arriba lo único que hice fue seguir a aquel chico asiático-¿Porque te arriesgaste a ayudarme en el tanque?-
Dijo el hombre vestido de Sheriff
-quizá porque sea un tonto o muy inocente al pensar que alguien haría lo mismo por mi, supongo que soy más tonto que tu-
Respondió el asiático y ante aquellas palabras solo pude reír, vaya no lo hacia hace tanto
Mis piernas no daban para más y creo que ese idiota hasta me había fracturado un pie, Mi cuerpo dolía e incluso mis huesos. Tantos golpes, bajamos por las escaleras del edificio las cuales nos ayudaron a entrar al edificio, corrimos por una habitación hasta llegar a más escaleras, no recordaba que los edificios tuvieran tantas escaleras a este paso moriré del cansancio y en ese momento mis pensamientos fueron interrumpidos por el chico asiático
-volví, tengo dos huéspedes y cuatro caminantes en el callejón-
Solo logró decir eso ya que al terminar de bajar las escaleras nos encontramos con más caminantes y retrocedimos un poco pero en ese mismo instante salieron dos hombres totalmente cubiertos y mataron a los zombies
Al entrar al otro edificio cerraron la puerta cuando ya todos estabamos adentro pero en ese instante una chica rubia apuntó con un arma al hombre vestido de Sheriff
-hijo de perra, deberíamos matarte-
Dijo la chica rubia
-calmate Andrea, retrocede-
Dijo Morales, bueno así le habían dicho cuando llegamos
-¿bromeas? Estamos muertos por culpa de este idiota-
Dijo la rubia que al parecer se llamaba Andrea
-Andrea dije que te calmes.. O disparale de una vez-En ese momento la rubia bajo el arma, vaya cobarde
-muertos todos.. Por tu culpa-
Dijo la rubia y bueno tenía algo de razón pero se estaba pasando un poco
-creo que no entiendo-
Dijo el Sheriff a lo cual Morales le respondió bastante enojado
-oye vinimos a la ciudad a buscar suministros ¿sabes cual es la clave de la búsqueda? Sobrevivir, ¿y la clave para sobrevivir? Entrar sin hacer ruido. No puedes disparar por las calles sin razon-
El hombre negro le siguió a la conversación-cada caminantes a kilómetros de distancia de oyó-
-vienen por su almuerzo-
Dijo la rubia y en ese momento los caminantes empezaron a romper las puertas de cristal así que retrocedimos un poco hasta que la rubia hablo
-¿que demonios hacías haya afuera?-
-quería contactar al helicóptero-
-¿helicóptero? Eso es una idiotez, no hay helicópteros-
dijo Morales seguido de la mujer negra que estaba ahí
-Perseguias una alucinación eso suele pasar--yo lo vi-
Dijo el sheriff totalmente seguro de lo que había visto
Los demás siguieron hablando a lo cual no preste mucha atención ya que estaba concentrada viendo que los caminantes no entraran, sostenía mi hacha con fuerza para no perderla hasta que se escucharon unos disparos que al parecer provenían del tejado del edificio, mire a los demás que estaban ahí los cuales se veían preocupados
-oh no.. ¿Ese no es Dixon?-
-¿que esta haciendo ese maníaco?-
Dijeron ambas mujeres y subimos lo más rápido posible al tejado donde encontramos a un hombre disparando a los caminantes lo cual los atraía aún más hacia nosotros, por dios si que estaba loco-¡¿oye Dixon estas loco?!-
Dijo Morales a lo cual el otro hombre solo respondió con una risa y se acercó hacia nosotros-
-oigan tengan más respetó al hombre armado-
Ni siquiera me importó que tuviera un arma y me acerque con intención de quitársela
-¡¿podrias dejar de ser tan estupido?! ¡¿Acaso quieres que nos maten?!-
Grite, ya estaba harta de estar rodeada de hombres tan idiotas como el
-Pero si encontraron a una niñita con agallas, luego me las arreglare contigo preciosura-
De un momento a otro aquel hombre ya estaba golpeando a T-dog mientras que todos intentaban que parara, quedé impactada al ver que no tenía ni una pizca de piedad, ya harta de su estúpida charla racista y sobre el ser el nuevo líder tome su arma que ahora estaba en el piso y lo golpee en la cabeza logrando hacer que cayera al piso a lo cual Rick logró esposarlo a un pedazo de metal
-¿quien eres amigo?- Pregunto merle
-el oficial amigable- respondió el sheriff
Continuará..
Vaya que será una larga historia pero para eso estoy yo para contarles como todo comenzaba, veía el comienzo del fin.
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𝙇𝙤𝙫𝙚 𝙢𝙚 𝘭𝘪𝘬𝘦 𝘺𝘰𝘶 𝘥𝘰
AdventureMary Hood ha estado en el mismisimo infierno desde la noche en la que decidio meterse con aquel hombre. Ella sufrió lo peor del abuso emocional y físico, pero mantuvo su humanidad a través de todo. Su vida se ilumina cuando logra escapar de el pero...