"Un accidente nos obligó a conocernos...Y no tienes idea de lo agradecida que estoy por ser la idiota que tropezó en su patineta, justo a pocos metros de ti"
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-Mamá...¿puedo ya salir a patinar? -pregunté mirandola, mientras ella preparaba unos sándwiches de mantequilla de maní y malvabiscos para mi- Ya estoy bien del brazo, no tengo moretones y...la herida de la palma está cicatrizando
Ella me observo por unos segundos, tomando mi brazo para inspeccionarlo bien y luego lo dejo, guardo un par de sándwichs en mi lonchera y me la dio
-Usa protección -ordenó seria- Te quiero con tu casco, las rodilleras y tus tobilleras en todo momento
-Claro que sí -asentí sonriendo y guarde la lonchera en mi mochila-
-Y lo digo enserio ______, no quiero que tengas otro accidente -agrego mamá y paso su mano por mi mejilla- No me gusta que te lastimes cada rato, ten cuidado
-Lo tendré, te lo prometo -le asegure para que estuviera más tranquila-. Llegaré a casa temprano, lo prometo también
-Vale, entonces anda ya
Ella beso mi frente como despedida, yo tome porfin mi skate y salí de casa, tomando la misma ruta hacía el parque. Sólo han pasado algunos días y la recuperación de mi mano y brazo van muy bien, ahora debo ser más cuidadosa al patinar o mi madre acabará por quitarme mi skate, y será deporvida
Al llegar al parque, mire a Aidan bajo el árbol como siempre está. Me baje del skate y lo tome en mis manos para ir hacia él
-Hola Ojiverde -lo salude sonriendole y me senté a su lado-
-Hola chica skaters -me sonrió de lado y beso mi mejilla- Que bueno es verte de nuevo, extrañaba tu compañía en el parque
-Y yo la tuya -deje mi mochila sobre mis piernas y le enseñe mi mano- Mira, ya a sanado mucho ¿a qué si?
Aidan tomo mi muñeca para ver bien mí mano, pasando sus dedos por la palma
-Si, se ve que está sananado -asintió él- Te dejará una linda cicatriz
-Otra más a la lista -me encogí de hombros y tome el par de sándwichs de mi mochila- ¿Te gustan los sándwichs de mantequilla de maní y malvabiscos?
-Nunca los e probado, solo los de mermelada de piña -tomo algo de su mochila y me ofreció un sándwich- ¿Quieres probarlo?
-Em...¿Tiene piña? -indague y él asintió- No puedo, es que...Soy alérgica a la piña
-¿En serio? No es una piadosa mentira para no comer? -enarcó una ceja mirándome y yo negue-
-No miento, de verdad soy alérgica...Lo descubrí cuando tenía cuatro años y comi un browni con trozos de piña, mi cara estaba roja y parecía un globo, apenas y respiraba
-Vale, mejor alejare esto de ti -señaló el sándwich y lo guardo en su mochila- Mejor probemos del tuyo
Le di uno enseguida, no tardo en darle un gran bocado