Wish You Were Sober

•:◦✩ parte única

Louis tiene 17 años, es un omega y vive una vida bastante tranquila y normal en el sur de Virginia. En su casa vive con su madre alfa y sus hermanas pequeñas, cuatro en total que son un desequilibrio de su paciencia diariamente, aunque las ama muchísimo.

Para tener diecisiete puede considerar que su vida siempre ha sido bastante simple y sin ninguna rebeldía adolescente, le encanta su modo de vida, que consiste básicamente en despertarse temprano para aprovechar al máximo su día, desayuna leche con cereales de avena y un zumo de naranja exprimido, se arregla, va al instituto, saluda a su mejor amigo, vuelve, hace los deberes y estudia, lee y se duerme. Y así durante toda la semana.

Justo ahora está tomando el autobús hacia la escuela, ya que lo tiene a unos cuarenta minutos andando. Tiene los cascos puestos mientras se sienta en su asiento habitual, my tears ricochet suena en su IPhone desde su playlist favorita, que se basa en un ochenta por ciento en Taylor Swift.

Llega al instituto tarareando la melodía de otra canción y se acerca a su taquilla. No se percibe de cuando un aroma a vodka y limón se acerca por detrás, por lo que suelta un grito cuando siente unas manos en su cintura.

Se sonroja completamente cuando ve a algunos alumnos girarse para mirarlo.

"¡Harry! Eres imbécil." Le pega un empujón en un hombro a su mejor amigo cuando se gira para enfrentar al alfa de ojos verdes.

Exactamente, Harry Styles, el alfa más popular de todo el instituto, capitán del equipo de fútbol americano y tan caliente como el sol en verano que arrastra una fila de omegas babeando el suelo que pisa. Aunque tras esa fachada que le dan los rumores del instituto, es un alfa caballeroso y cariñoso, y ama pasar tiempo con su pequeño mejor amigo al que conoce desde que tienen 7 años, incluso antes de presentarse.

Y para qué mentir, Louis también está un poco enamorado de él, por lo que soportar cada día la información nueva que tiene que contarle sobre algún que otro omega le hace daño en su corazón inocente y solitario. Nunca se ha planteado confesarse, llevan tantos años siendo mejores amigos que lo último que querría es arruinar su amistad por sus sentimientos caprichosos, además a quién quiere engañar.

Harry es un alfa alto y musculoso de ojos verdes y labios pulposos y rosados, tiene un encanto natural con la gente y se lleva bien con todos sin intentarlo. Y Louis... es Louis.

"Buenos días a ti también, Lou." Se apoya en la taquilla de al lado de brazos cruzados, con una sonrisa radiante que hace suspirar al omega, su olor a flores y sandía liberandose en feromonas de felicidad.

"¿Cómo llevas el examen de física?"

"Bien, bueno, no he estudiado mucho. Oye el viernes Paul hace una fiesta de Halloween en su casa y me ha dicho que lleve gente así que obviamente te pregunto si quieres venir conmigo."

"...No sé, Hazz."

"Vamos, Lou. Te juro que nos lo pasaremos genial y que estarás conmigo toda la noche si quieres, podemos hacer disfraces conjuntados como cuando éramos pequeños." Ha movido sus brazos de sitio y ahora están sujetando sus hombros en un intento de ejercer más presión en su propuesta.

"No, porque seguro que luego me abandonarás por alguno de tus ligues y no sabré que hacer yo solo."

"¿Cuándo he hecho eso? Anda, por favor, hace muchísimo que no salimos juntos de fiesta."

"¿Por qué tanta insistencia? Si sabes que no voy casi nunca." Levanta una ceja aunque sabe que ya va a aceptar, pero siempre disfruta de los ruegos de su amigo cuando le pide algo.

"Porque me gusta pasar tiempo contigo, porque quiero que te diviertas y porque quiero disfrazarme de Bonnie y Clyde contigo." Sus palabras hacen sonrojar a Louis, sigue sin acostumbrarse a que el rizado sea tan sincero con él.