Carta veinticinco.

31 2 0
                                    

Querido D.
Y mí problema fue querer ser aire para que pudieses respirarme.
Mientras que fui yo la que término por embriagarse.
Ahora mis pulmones solo a ti pueden respirarte.
Pero tu sigues ahí contaminante y sin amarme.

Querido D.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora