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—Últimamente Yujin ha estado muy pegada a Xiaoting– comentó Mashiro.

—¿No será que Xiaoting está pegada a Yujin?– cuestionó Hikaru.

—Estamos pegadas una a la otra– respondió Yujun mientras entraba al salón, abrazando a Xiao por la espalda y esta sonreía abiertamente.

Todas las miraron con las bocas abiertas, esto era simplemente algo extraño. Nunca habían esperado que Xiaoting y Yujin estuvieran juntas.

—Cariño– susurró Choi al oído de la chica. Esta se estremeció. De nuevo ese apodo que tanto le hacía sonrojar— Veamos una película hoy~

—Tengo práctica– susurró de vuelta.

—Entonces practiquemos juntas– jugó con el cabello de la contraria, esta solto una risilla.

—Bien.

Las chicas seguían ahí, curiosas de que se estaban susurrando esas dos. Y es que para "coquetear" no eran nada discretas o silenciosas. Hasta ellas sienten el nerviosismo de Xiaoting.

—Seguimos acá sucias.

—¡No era nada sucio!– exclamó Xiao.

—Quien dice que no– Yujin comentó y Xiaoting la miró casi asesinándola con su mirada– perdón.

Llegó la noche y la práctica "individual" de Xiaoting. Si bien tenía que estae sola para practicar mejor su baile, Yujin la estaba acompañado.

Se sentía irreal como Choi se aferraba a ella, como le llamaba de muchos apodos y la hacían sonrojar cada vez que estaban juntas. Xiaoting juraba que se sentía en las estrellas cada vez que Yujin pasaba tiempo con ella. Y esta vez no es un sueño.

Xiao comenzó a moverse al ritmo de la música, fue deteniéndola cada vez que veía en el espejo que un paso le salía algo mal y así todo el tiempo. Su acompañante solo estaba allí mirándola, observando como el cuerpo de Xiaoting se movía con esa delicadeza que siempre tenía. Analizaba sus pasos, su destreza y dedicación. Estaba segura que volvería a acompañar a su menor a las prácticas.

—Unnie– era la tercera vez que Xiaoting repetía esa palabra pasando una mano por los ojos de la mayor.

—¿Terminaste?– preguntó la que estaba sentada en el frío piso de la sala.

—Sip, vamos ya– sonrió y le tendió una mano a Yujin. Esta sonrió de lado y tiró más fuerte que la pelirroja, haciendo así que se sentara en su regazo, de frente.

—Bailas precioso.

—Unnie.

—Shh– pasó sus brazos por la cintura de la chica. Se acercó de a poco a Xiaoting, mirando con toda atención sus labios. La última mencionada miraba los ojos de la castaña.

Yujin llegó por fin a los labios de su menor, la cual también aceptó el beso, moviendo sus labios al ritmo de su unnie. Pasó sus brazos por el cuello de la mayor y así juntaron sus rostros aún más.

Se sentían en una montaña rusa de emociones, cada una era diferente a la otra, sentían que sus corazones saldrán de sus pechos, rodi parecía irreal, pero era real.

Tanto tiempo tuvo que esperar Xiaoting para volver a probar los labios de Choi, esta vez de verdad. Todo lo que había soñado era precioso pero no más que sentir como Yujin apegan sus belfos a los suyos.

Yujin no podía sentirse más libre. Estar con Shen la hacía cada vez más feliz, su presencia era más que suficiente para animar cada día. Nunca había experimentado un amor tan verdadero y puro como el que siente por su menor. Todo en su corazón era tan sincero que podía simplemente confesarle su amor eterno.

Pero este solo era el primer paso de muchos escalones que deberían subir juntas.

—Unnie– susurró al separarse por fin, tratabdo de reponer su respiración.

—Gracias por ser mi ángel– le dejó un pequeño piquito en la nariz y abrazó con algo de fuerza el torso de Xiaoting. Esta también la rodeó con sus brazos.

Se fundieron en un abrazo que fácilmente pudo haber durado media hora. Aunque no lo saben bien, porque se quedaron dormidas en el salón.

Mommy Issues | xiaojinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora