Capítulo 2

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ANDI'S POV

Era mi primer día de clases, estaba sentada en una mesa redonda con otros niños a mi alrededor, ninguno me hablaba y para mi gusto todos se movían muy rápido en las actividades que nos asignaba la maestra, después de presentarme frente a la clase me habían sentado en una de las mesas de enfrente, pero yo me sentía algo pérdida, intentaba colorear aquella figura geométrica sin aburrirme ni salirme de la línea pero al parecer la maestra ya se había movido a otra asignatura y todos los niños se habían levantado de su asiento para agarrar un libro de una estantería de la clase, yo ni sabía en qué clase se supone que estábamos.

–Hola, me llamo Sebastián Alo, mira podemos compartir mi libro hasta que la maestra te asigne uno– un niño de cabello negro, ojos marrones y una cara bastante tierna se acercó a hablarme después de ver mi confusión, al fin alguien se compadecía de mi– esta es la clase de lectura, solo tenemos que leer el capituló que la maestra nos indique y después responder unas preguntas.

Asentí con mi cabeza– me llamo Andrea Agosti– empezamos a leer un capituló de un libro donde un niño aprendía a preparar pizza, me gustaba porque tenía muchos dibujos y colores, y era un libro muy gracioso.

A la hora del recreo estaba sola comiendo la lonchera que mi madre había empacado para mi, mientras tomaba mi leche Sebastián volvió a sentarse a mi lado y me ofreció un pedazo de su sándwich.

–Te dejo probar mi sándwich de queso si tú me dejas probar tu cup cake– sonaba razonable para mi, así que le tendí mi cup cake después de dar una mordida a su comida–¿por que no hablas? ¿No sabes hablar?

–Si se hablar, pero no se que decir– en mi cabeza era una respuesta tan lógica como 1+1=2, pero al parecer para el chico a mi lado no fue suficiente.

–¿Te gusta la pizza? Porque a mi me gusta mucho la pizza, es deliciosa la comería todo el tiempo, pero mi mamá no me deja– asentí enérgicamente con la cabeza para corroborar mi gusto por la pizza, estire un poco mi pierna haciendo que mi pequeña bolsa cayera a mi lado y mi juguete favorito saliera rodando–¿te gustan los autos?– con esa sola pregunta tenía toda mi atención.

–Me gustan muchos los autos, tengo muchos en mi casa y mi cama también es un auto, esta increíble– le respondí mirándolo, este chico me caía muy bien, quería jugar con el.

–¿Tu cama es un auto? Le voy a decir a mi mamá que me lleve a tu casa para ver tu cama– Asentí enérgicamente, al fin alguien jugaría conmigo y no tendría que pasar más tardes sola como las ultimas semanas, era algo aburrido.

–Entonces ¿eso significa que eres mi amigo?– las cosas claras ante todo.

–Solo si tú quieres ser mi amiga– me respondió Sebastián levantando sus hombros como si fuera lo más obvio. Jugamos el resto del receso en la arena con mi carro y otros juguetes más.

Al finalizar las clases, teníamos que esperar dentro del aula a que pasaran a buscarnos. Una señora de cabello rubio y la sonrisa más amigable que había visto entró con una niña que agarraba su mano, vi cómo sebas salía corriendo a saludarlas, yo un poco más tímida me acerqué más despacio.

–Mamá, ¿puedo ir a la casa de Andrea a jugar?– era su madre, mis ojos no se despegaban de la señora esperando una respuesta, pero sentía una mirada sobre mi, desvíe mi visión en busca de la persona que me observaba y vi a la pequeña rubia escudriñándome atentamente de arriba abajo, con su semblante serio.

–No lo sé, primero necesito hablar con sus padres– Justo cuando la señora terminaba la frase, escuché la voz de mi madre llamarme en la puerta del aula, yo salí corriendo a su encuentro y estando frente a ella solo tome su mano para llevarla a rastras hasta la madre de sebas.

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⏰ Última actualización: Aug 21 ⏰

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