Siempre había sido la misma mierda, pero estaba segura de que el infierno no era tan malo.
Dos overloads sumamente poderosos.
¿Estaban destinados a estar juntos?
Quien sabe.
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Di un leve suspiro, las horas habían pasado rápidamente y ahora me encontraba volviendo al hotel, como tengo la mejor puta suerte del infierno, empezó a llover, si sorprendentemente en la puta mierda esta también llueve.
El cigarrillo se apagó, mierda debí de haberme quedado en la mierda del prostíbulo de Valentino.
Las probabilidades de que lloviera en el infierno eran de el 10% una puta mierda.
Mis manos empezaron a temblar levemente, tal vez por el frío de la lluvia o tal vez porque estaba estresada.
Me detuve en una especie de mini techo para agarrar un par de pastillas y tomarlas, encendí un cigarrillo comenzando a fumar.
—¿Oh, estás bien Kunai?—La voz de la sombra se escuchó sumamente burlona, simplemente la ignore desviando mi mirada a la especie de luna del infierno.—Eso supuse— Otra risa.
Una leve tos se hizo presente en mi, el mismo sentimiento de ahogo de siempre, ¿Sería mental o físico? Tal vez la obsesión a los cigarros me había hecho mal.
Costaba respirar cada vez más, suspiré algo cansada, no estaba preocupada, ahora se volvía algo normal.
Me recosté un poco en la pared, apagué el cigarrillo y di un largo suspiro.
La lluvia hacia mucho mas difícil ubicarme que de normal.
Pero no todo era malo, me agradaba la lluvia, los gritos no se escuchaban por la lluvia, las calles eran aún más oscuras y habían demonios refugiándose en callejones, perfecto para matar.
Abrí los ojos de golpe y arreglé mi gabardina para seguir caminando.
No tenía prisa, de igual forma la lluvia ya comenzaba a molestarme, no podía encender un puto cigarrillo con esa mierda.
Pasos más pasos, miré hacia un punto en específico, la sombra desapareció rápidamente, ¿Sería una más de el montón? No la reconocía.
Mi pelo se encontraba completamente mojado, era jodidamente molesto, ahora tapaba completamente mis ojos y lucia mas apagado de lo usual, tal vez era por la luz o algo así, apresuré un poco mis pasos para llegar mas rápido, puesto a que vi el hotel a lo lejos.
Probablemente Charlie ya estaría dormida, no me jodería demasiado por desaparecerme.
Mis pensamientos comenzaron a deteriorarse, toda esa mierda, no quería pensar en eso, quería desaparecer todos eso recuerdos ¿Por que no podía olvidarlo? Lo odiaba, odiaba ese sentimiento, algunos movimientos involuntarios se hicieron presente presentandose en forma de tics, respiré hondo con algo de dificultad intentando calmarme.
Di una sonrisa falsa al estar en la puerta del hotel, esperaba que la araña travesti estuviera despierta, abrí la puerta esperando no encontrarme a la princesa lesbiana de el infierno, no estaba de buen humor.
