Invaluable | ChanBaek

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Para Baekhyun la vida nunca había sido demasiado difícil. En otros tiempos quizá habría tenido que aceptar un cruel destino, casándose con algún alfa exitoso de una familia prominente.

La revolución se había dado paulatinamente, primero las personas dejaron de creer en el amor y simplemente se unían por conveniencia y practicidad. Aquel tema de "encontrar a la pareja destinada para ti" era más un cuento de hadas, que una realidad.

La sociedad permaneció de esta manera durante décadas, tiempo en los omega fueron utilizados como si su única importancia fuera gestar y dar a luz. Los alfa controlaban la economía, los servicios y tenían el poder, sin importar de que familia provinieras, si eras omega jamás tendrías los mismos derechos que un alfa.

Con el tiempo, los omega se cansaron de las injusticias y alzaron la voz, protestaron y lucharon durante un largo tiempo, hasta que pudieran conseguir la equidad. No obstante, el poder logró corromper a muchos, que mas allá de igualdad, anhelaban la supremacía.

De alguna manera las cosas fueron al extremo opuesto para algunos omega. Aquellos con mayores recursos pudieron alzarse entre los demás, colocándose a la par y mucha veces por encima de los alfa, llegando a ejercer la misma opresión de la que antes fueran víctimas.

Finalmente, con el paso del tiempo la desigualdad se acentuó, creando una mayor brecha entre aquellos alfa y omega que tenían el privilegio suficiente para salir adelante y el resto de la sociedad. Aquello había dejado de ser un tema de género y se había convertido simplemente en quién podía comprar el poder y quién debía resignarse.

Los matrimonios por conveniencia, si bien disminuyeron, no desaparecieron, pues casarse con un alfa con alto estatus seguía siendo una herramienta de control para un omega con de la misma clase social.

La familia Byun mantuvo aquella costumbre por mucho tiempo igualmente, sin embargo, y pese a que sus padres tuvieron la buena fortuna de lograr amarse con el tiempo, no deseaban el mismo destino para su hijo. Muchas otras familias también intentaban cambiar poco a poco aquel panorama y tenían aún esperanzas en que el futuro fuera más brillante para las futuras generaciones.

Es por ello que Baekhyun no tenía demasiadas complicaciones, pudo estudiar y trabajar exitosamente. No tuvo mayores obstáculos y poseía total libertad para elegir con quién pasar su vida. Desgraciadamente, en su círculo no había muchas personas que le parecieran interesantes.

Baekhyun sabía que era privilegiado, que la gente a su alrededor siempre lo tuvo todo y por lo tanto no conocían el esfuerzo. Muchas de esas personas estaban vacías, hablaban trivialidades sin sentido y se sentían dueños del mundo. Todo eso a él le parecía sencillamente lamentable, le daba la impresión de que entre más riquezas acumularan, más pobre era su mentalidad.

No era sorpresa entonces que Baekhyun hubiera permanecido soltero durante tanto tiempo, y que estando en sus treinta no consiguiera conectarse con alguien más lo suficiente como para formar una pareja estable. Y eso estaba bien, estaba cómodo con eso.

Era solo que a veces la vida parecía demasiado… aburrida.

Aquella mañana, por ejemplo, no había ocurrido nada lo mas mínimo interesante. Había estado en su oficina intentando resolver algunos asuntos pendientes, pero, abrumado por la cantidad de papeleo, se había tomado un breve descanso.

Baekhyun reconocía que si tenía un vicio que medianamente lo hiciera parecer el individuo de clase alta que era, éste se  trataba de comprar. Las compras eran entretenidas, a veces compraba regalos para todos sus subordinados y no le gustaba tener que ser “esa” persona, pero inevitable terminaba preguntándose que hacer con todo su dinero.