1

677 85 15
                                    

¿Aún recuerdas cuando nos conocimos?
Porque yo lo recuerdo como si fuera ayer... Éramos niños, un día tranquilo en el jardín de niños, recuerdo perfectamente cuando yo jugaba solo en una parte específica del césped sin la compañía de nadie. No era porque me gustara estar solo, era porque no tenía amigos. Creía que nunca los tendría. No hasta que tú llegaste de la nada y me hablaste, fuiste diferente a los demás porque ellos me tenían miedo por el hecho de mis pecas, ¿Qué tenía de raro eso?, incluso tú te lo habías preguntado, pero lo único que podía contestar era con un “No lo sé ”.
Fue ahí cuando me empezaste a hablar seguido y empezamos a ser amigos, mejores amigos.

Días después tu madre y la mia se habían conocido, se habían dado cuenta que eran parte del mismo vecindario, que éramos del mismo vecindario. Fue así como ahora solíamos salir por las tardes todos los días.

Fue totalmente lindo mientras duró.

Porque cambiaste.

Cambiaste totalmente y eso me hizo cambiar a mi, me cambiaste porque me rompiste sin ningún aviso.

Y dolió con todo el alma. Porque nunca me había imaginado que mi mejor amigo de la infancia me fuera a hacer algo así.
Pero sé que no fue tú culpa, fue la de los demás. Lo fue porque te llenaron la mente de porquería, no me gusta decirlo pero es verdad.
Te dijeron que eras mejor que todos y que tenías que superarlos siempre sin importar qué.
Y lo eres, sí que lo eres.
Pero no de la forma e intención en la que ellos te lo decían.

¿Querías cumplir sus expectativas, no?
Fue así que te alejaste de mi y empezaste a hacerme la vida imposible. Querías cumplir las expectativas de tus nuevos amigos, tanto que terminaste olvidandote completamente de mí, del como me sentiría, de mis sentimientos.
De nuestra gran amistad.

Y lo más inútil y estúpido fue que yo te perdoné. Y lo haría las veces que fueran.

Te perdoné porque eras importante.
Te perdoné porque eras la gran cosa más importante para mí.
Te perdoné porque te amaba completamente.

Y dolía demasiado saber que incluso así, no volveríamos a ser los mismos de antes. Como cuando éramos unos niños.

Fue así como me sentía solo porque simplemente, me había quedado sin amigos, físicamente. Pero mentalmente, tú lo seguías siendo, siempre lo eras, siempre lo serás.

Y digamos que cumpliste con lo que querían los demás, me hiciste la vida imposible, tanto que pensé demasiadas veces en acabar con esto llamado “vida”. Y era porque estaba estresado, enojado y triste. Todo eso gracias a tí y los demás porque siempre estaban ahí para criticarme la más mínima cosa.
Y eso me hacía sentir mal, me hacía sentir miserable.

Y el tiempo pasaba una y otra vez...
Entramos a preparatoria y al menos... Al menos pude hacer más amigos, más amigos que solo tú. Era como estar contigo pero no estar contigo. Porque tú también tenias otros amigos.
Porque entramos a la misma preparatoria. Porque los dos teníamos el sueño de ser el héroe número uno.
Y creí que me harías lo mismo de antes, ya sabes, molestarme hasta el punto de que en lo único que piense al despertar es matarme y acabar con mi sufrimiento. Pero no, no lo hiciste.

No porque no quisieras, si no que te lo impidieron. Tus nuevos amigos te lo impidieron.
Y si no lo hubieran hecho, ¿qué hubiera sido de mí? Tal vez no estaría escribiendo esto.

Esto es triste.

Quiero que todo sea como antes pero no puedo hacer nada, no puedo revertir lo que haz hecho. Ni siquiera tú.

Porque ambos estamos rotos, yo lo sé.
Lo noto en tus ojos. En tus lindos ojos color carmesí. Ojos que me hicieron sentir amado. Ojos los cuales me hicieron caer en depresión una y otra vez. Ojos los cuales me mataron emocionalmente.

¿Esto algún día cambiará?
¿Lo cambiarás? o ¿Tú cambiarás?
¿Cambiaremos los dos?
¿Seremos los de antes?
¿Volverá el “Kacchan” que yo conocía?

Quiero que vuelvas de nuevo hacia mí para que así mí alma pueda volver a vivir.

Its You Donde viven las historias. Descúbrelo ahora