La luz brillante me cegó por un momento. Dí sin pensarlo un paso adelante, pero allí había un abismo.
T/n: Ah!
Algunas piedras cayeron. La niebla empezó a retroceder y una cascada apareció en el horizonte.
T/n: Dónde estoy?
El agua burbujeaba y silbaba, pero en lugar de caer sobre las piedras de abajo, esta subía hacia arriba.
T/n: Creo que... creo que estoy dormida
Este pensamiento me tranquilizó un poco. Y, sin embargo, ¡qué real parecía todo!
Detrás de mis espaldas se extendía un bosque con enormes árboles. Tenían ramas muy torcidas, que se levantaban hasta el cielo.
Me dí la vuelta y miré hacía abajo de nuevo.
???: Actúa!!
La voz sonó en mi cabeza y al mismo tiempo desde todas partes. Ella resonó como un trueno, como un golpe en un gong.
Me dí cuenta de que si no lo obedecía, si permanecía de pie, algo terrible pasaría.
T/n: Las personas no pueden morir en el sueño. Esto me ayudará a despertar.
Retrocedí un poco, dí algunos saltos y salté.
T/n: ¡Aaa-aa!
El vacío me abrazó. Mi corazón latía con fuerza y mi pecho estaba apretado por el horror.
T/n: ¡Esto no es un sueño! Voy a morir!
El miedo prevaleció sobre todas las emociones. En un intento desesperado por salvarme, mis manos intentaban encontrar algún apoyo, como si pudieran agarrarse del aire.
Cerré los ojos, incapaz de mirar a la muerte que se acercaba.
Y de repente ¡Algo se abrió desde atrás, deteniendo la caída!
Algo me tiró hacia arriba, y solo entonces me dí cuenta de que algo se estaba moviendo.
T/n: ¡Las alas!
Las movía intuitivamente. Una risa histérica irrumpió de mi garganta.
T/n: ¡Es para volverse loca!
Pero tan pronto como mis pies tocaron el apoyo, las plumas, como unas hojas en otoño, empezaron a caer, hasta que no quedó nada de ellas.
Todo se congeló, empezó a balancearse, y después de eso se disolvió, desapareció poco a poco, como un espejismo pasajero.
Luego mis dudas desaparecieron y volví al mismo sitio donde estaba en un principio.
Se oyeron palmadas cortas y patéticas.
Me estremecí y me giré hacia el sonido.
???: ¡Bravo! Saltar al abismo-es un acto muy valiente, incluso para alguien que piensa que es un sueño.
T/n: ¿Quién es usted?
En lugar de contestar, él extendió sus alas. Tenía piel color gris y ojos azules que podrían hipnotizar a cualquiera.
H: Mi nombre es Heraldo.
Una mujer y un chico salieron del bosque. Detrás de ellos, rebotando de alegría, iba una bestia extraña.
Bestia: ¡Frr!
???: ¡Qué chica tan guapa! Felicidades por pasar el examen.
El chico que venía con aquella extraña mujer se quedó callado, solo me miraba de manera apreciativa.
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Holy Hell
RomanceMueres de una manera bastante misteriosa, pero cuando piensas que es el fin, despiertas en un lugar muy hermoso pero a la vez desconocido, dando a entender que es solo el comienzo de tu aventura. Tendrás que vivir en un mundo donde tendrás que elegi...
